Miguel Montes Neiro, considerado el preso común más antiguo de España e indultado por el Gobierno a principios de 2012, fue detenido ayer junto a otras cinco personas por su presunta vinculación con el robo a mano armada de cuatro millones de euros en joyas en un centro comercial de Puerto Banús el 18 de noviembre pasado.

Según ha podido saber La Opinión de Málaga, la investigación está muy bien encauzada desde el principio, aunque los agentes dejaron correr el tiempo con el objetivo de seguir el rastro de todas las joyas y recuperarlas, aunque este extremo no ha sido confirmado oficialmente. Entre los detenidos podría encontrarse un trabajador del propio centro comercial, persona que habría facilitado a los atracadores información precisa sobre la seguridad de las instalaciones y fuentes cercanas a la investigación lo definen como un «integrante activo» en el asalto. Ahora habría que saber el papel de cada uno de los detenidos en un atraco en el que la escena sumó tres asaltantes que, haciéndose pasar por personal de mantenimiento, redujeron a los tres vigilantes de seguridad que custodiaban el lugar. Eran las 16.00 horas de un domingo y las puertas estaban cerradas al público. Los ladrones sustrajeron un botín en joyas y bisutería y maniataron a otros tres operarios que se encontraban trabajando en el establecimiento. Todos permanecieron atados durante más de dos horas hasta que uno se soltó y alertó a la policía, mientras que los atracadores se dieron a la fuga en el coche de uno de los vigilantes que estaba aparcado en una puerta de servicio del edificio para bloquear la entrada.

Hasta su salida de prisión el 15 de febrero de 2012, Montes Neiro fue considerado el preso común más antiguo de España tras llevar 36 años enlazando condenas sin delitos de sangre. El granadino llevaba desde 1976 sumando diversas penas y protagonizó hasta ocho intentos de fuga. El último de ellos tuvo lugar en noviembre de 2009 en un permiso penitenciario para asistir al velatorio de su madre en Granada.

Miguel Francisco Montes Neiro ingresó en prisión por primera vez en 1966 y durante su estancia en prisión cumplió condena por los delitos de deserción militar, contra la salud pública, robo, quebrantamiento de condena, contra la seguridad del tráfico y falsificación de documento público, entre otros. El 4 de mayo de 1994 se le concedió la libertad condicional, pero volvió a prisión el 7 de febrero de 1997 por cometer nuevos delitos. El 23 de diciembre de 1996, junto con dos cómplices, retuvo a punta de pistola a dos joyeros y les robaron dinero y joyas tanto en su casa como en el taller de joyería en el que trabajaban. Fue condenado por la Audiencia Provincial de Córdoba a penas de 3 años y 6 meses, dos de cuatro años y otra de 1 año y 6 meses por los delitos de detención ilegal, robo con intimidación y tenencia ilícita de armas.

También el 1 de enero de 1997, con un cómplice, retuvo a un padre y su hija haciéndose pasar por policía. Una vez en la vivienda, los amenazaron con armas para que abrieran la caja fuerte con intención de robar, aunque no lo consiguieron. Por estos hechos, la Audiencia Provincial de Málaga condenó a Montes Neiro a dos penas de 1 año y otra de 2 años y 6 meses por los delitos de robo en grado de tentativa, tenencia ilícita de armas y detención ilegal. En 2003 se le concedió un permiso de salida del que no regresó permaneciendo fugado tres años en los que cometió nuevos delitos. Según sentencias judiciales, el 21 de junio de 2006, junto con tres cómplices, amenazó con una pistola a un hombre que regresaba a su casa. Tras una campaña pública pidiendo su indulto, en la que incluso recibió el apoyo público de dirigentes de todos los partidos políticos, finalmente el último Consejo de Ministros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero le concedió el indulto de algunas de sus penas. No salió de prisión hasta el 15 de febrero de 2012, cuando la Audiencia Provincial de Málaga confirmó la resolución por la que se abonaron 124 días de prisión preventiva a Montes Neiro y se adelantó su puesta en libertad.