Los diseños que han servido de modelo para construir los nuevos chiringuitos en las playas de Málaga capital fueron presentados hace unos meses a una docena de empresarios de Torrox que han empezado a readaptar sus instalaciones de acuerdo a la nueva normativa. El hecho de que los proyectos ya estaban redactados podía reportarles un descuento. Sin embargo, el sector se opuso por aspectos «estéticos» y porque la inversión de las obras «sería demasiado costosa» en un municipio «donde todavía sufrimos una importante estacionalidad».

Lo remarcó ayer el delegado local de la Asociación de Empresarios de Playa, David Villena. «El modelo no nos llamaba la atención y encima requería una inversión de casi 400.000 euros. Los de La Misericordia, con el techo con una vela, nos gustan más. Lo que no entendemos es la polémica entre administraciones. Porque esos proyectos tenían el visto bueno general», señaló el portavoz.

La concejala torroxeña de Playas, Mari Nieves Ramírez (PSOE), agregó que en un encuentro con todos los empresarios locales, al que asistió el presidente provincial de los mismos, Manuel Villafaina, «se planteó ese proyecto por ser más funcional y abaratar costes». E insistió en que el Ayuntamiento no se cierra no obstante a ningún diseño específico: «Estamos abiertos desde el gobierno local al que pueda ser consensuado por todos los concesionarios».

Villafaina matizó que no fue en cualquier caso la única propuesta sobre la mesa, debido a que en términos como el de Mijas se ha planteado otra alternativa. «Aquí con La Malagueta hay quien se ha pasado cien olas. El modelo elegido en Málaga es normal y corriente, con independencia de lo que se pueda opinar ahora sobre los aseos. En todo momento hubo consenso a la hora de recibir los pertinentes permisos. Es un diseño que personalmente me parece bastante bonito», indicó.

Quien tampoco opina igual es el concejal de Turismo y Medio Ambiente de Algarrobo, Rafael Segovia (PA). «Este domingo he podido ver lo que se está haciendo en La Malagueta y me parece increíble. Son establecimientos antiestéticos y hechos de cemento, cuando en Algarrobo Costa se nos permitió únicamente, por parte de Costas, hacerlos de madera. Vuelve a haber discriminación con respecto a la Axarquía en este asunto», argumentó.

Vélez y Rincón los descartan. Tanto Vélez Málaga como Rincón de la Victoria, según sus dirigentes municipales, tampoco están dispuestos a implantar en sus respectivos términos el proyecto que se desarrolla actualmente en la capital costasoleña.

El concejal veleño de Playas, Emilio Martín (PP), explicó ayer que existen en su municipio unos 25 chiringuitos, la gran mayoría en Torre del Mar aunque también en Benajarafe y Chilches, «localizados en la arena junto al paseo». Aunque por ahora no se ha empezado a levantar ninguno nuevo, «se está pendiente de la concesión de las autorizaciones necesarias para la ocupación de los chiringuitos en la zona costera, competencias que fueron traspasadas a la Junta de Andalucía». Martín indica que se va a pretende consensuar con el sector el modelo de los futuros establecimientos: «Pero de ninguna forma serán como los que se están implantando en Málaga».

En Rincón de la Victoria se encuentran otros 17 chiringuitos y tampoco se construye «ninguno nuevo». Pero en términos similares, el edil de Playas, Sergio Díaz (PP), resalta que tampoco se seguirá en un futuro el ejemplo del municipio vecino, «ya que en principio se planteó que fueran de madera, pero aunque se descartó esta opción, se están estudiando otras que estén en consonancia con el entorno y que visualmente sean atractivos».

Sanciones millonarias en Torrox. Precisamente en mitad de la polémica abierta por los chiringuitos que se edifican en Málaga, el delegado de los empresarios de playa de Torrox, David Villena, denunció ayer que cerca de una decena de concesionarios han empezado a recibir sanciones por parte de la Demarcación de Costas, «de unos 120 euros por metro cuadrado y día», como consecuencia de una supuesta «inadaptación de sus establecimientos a la normativa actual».

Villena ha denunciado que el sector no puede «pagar los incumplimientos que sean responsabilidad de otras administraciones», refiriéndose al Ayuntamiento y la Junta de Andalucía. «Aquí en Torrox pagamos hasta 24.000 euros de canon anual, cuando el máximo en Marbella no pasa de 4.000. Confiemos además en que las multas no tengan carácter retroactivo, porque serían una auténtica ruina en todos los casos».