La Unión Profesional Sanitaria de Málaga mostró ayer su apoyo al modelo actual de farmacia, basado en la proximidad del servicio en cualquier punto de la geografía española, motivo por el que advirtió de los efectos que conllevaría al sector el Anteproyecto de Ley de Servicios Profesionales en el que trabaja el Gobierno central, y que aboga por la «desvinculación entre la titularidad y propiedad de una farmacia, y que facilita ser propietario a cualquier persona física o jurídica». A juicio de esta entidad, si la norma ve la luz «se dejará desatendida a una gran parte de la población, no teniendo la garantía sanitaria actual».