La facturación de los talleres malagueños caerá previsiblemente un 14,5% al cierre del ejercicio 2013, hasta situarse en 333,5 millones de euros, según el estudio «Evolución de la posventa en la crisis», elaborado por Audatex con motivo del III Foro de Automoción de Andalucía organizado ayer en Sevilla. En los talleres andaluces, los ingresos caerán un 10% este año, hasta situarse en 1.500 millones de euros. El informe -realizado a partir del análisis de más de 4,2 millones de valoraciones de siniestros- atribuye esta caída del mercado al desplome de las matriculaciones. Concretamente, Málaga acumula un aumento de sus ventas del 4,3% hasta mayo, con una previsión para el cierre del año de 17.700 unidades; cantidad similar a la de 2012, según la patronal de concesionarios Ganvam.

Además, esta caída de las matriculaciones unida al alargamiento de la vida útil de los vehículos ha favorecido el envejecimiento del parque malagueño, que suma ya cerca de 862.000 vehículos. En la actualidad, el 50% del parque ronda los diez años, lo que explica que el 60% de las reparaciones se realicen en vehículos de hasta siete años. Antes de la crisis más de la mitad de las intervenciones en taller se daban en vehículos de hasta cinco, precisamente los que mayor rentabilidad e ingresos reportan.

En cuanto al importe de las reparaciones, aquellas de hasta 600 euros, las más económicas, se han convertido en las predominantes (56% del total), mientras que las que se mueven entre los 600 y 1.200 euros suponen el 22%. Aquellas comprendidas entre los 1.200 y 3.000 euros representan el 18% mientras que las mayores de 3.000 tan sólo suponen un 5%.