Los motoristas de la ciudad de Málaga llevan años reclamando más plazas de aparcamiento. Debido a la densidad de tráfico de la ciudad, la moto se ha convertido en uno de los medios de transporte más utilizados por los ciudadanos. En los últimos ejercicios el Área de Movilidad del Ayuntamiento ha tratado de buscar soluciones a la carencia de plazas en las calles de numerosos barrios. Actualmente en Málaga existen un total de 4.325 aparcamientos para vehículos de dos ruedas, distribuidos por la ciudad a través de 2.810 metros lineales, aprovechables por una o dos motos, dependiendo del tamaño de cada una.

A pesar de las iniciativas llevabas a cabo por el Ayuntamiento de Málaga el número de plazas sigue siendo muy reducido para atender a la demanda de una ciudad con tradición motera y en la que muchos conductores siguan dejando sus vehículos de dos ruedas sobre la acera debido a la falta de espacio regulado.

En 2012 la ciudad de Málaga contaba con alrededor de 4.000 plazas y 2.600 metros lineales de aparcamiento. Las medidas llevadas a cabo durante 2013 han permitido que, a día de hoy, el número total haya ascendido en 325 en cuanto a plazas y en 210 metros lineales.

El concejal de Accesibilidad y Movilidad del Ayuntamiento de Málaga, Raúl López comenta al respecto: «Aumentar el número de plazas de aparcamiento para motos es una necesidad en Málaga». Añade además que «el objetivo del eÁrea de Movilidad del Ayuntamiento es dinamizar las plazas para aparcar en los diferentes distritos de la ciudad». Durante el presente ejercicio zonas de Málaga como Plaza de Toros vieja o la calle Salitre han sido los principales objetivos del Ayuntamiento para facilitar y dar una salida a los problemas de estacionamiento de vehículos de dos ruedas. «Hemos aumentado alrededor de 400 plazas al año, eso muestra el ánimo de este equipo de gobierno que apuesta por los conductores malagueños», sentencia el concejal.

El Ayuntamiento, a través del edil, confía en que las nuevas plazas sirvan para aliviar las necesidades de los motoristas de Málaga, que durante años han reivindicado más espacio reglado para estacionar en la vía pública. Especialmente en algunas de las zonas más frecuentadas de la ciudad, como los paseos marítimos y el nudo de grandes calles del centro.