La calle Larios de Málaga se transformó anoche de nuevo en una auténtica pasarela de moda. La capital albergo la segunda jornada de La III edición de Pasarela Larios Málaga Fashion Event , un evento que durante este fin de semana ha llenado el corazón del Centro Histórico de mucha elegancia, diseño y sofisticación, por supuesto con sello malagueño. El viernes fue el turno de los diseñadores locales más importantes y ayer les tocó a las marcas comerciales. Un gran espectáculo en el que desfilaron los outfit que los malagueños podremos adquirir en las tiendas del Centro para la próxima temporada de otoño.

Así mostraron sus propuestas La Gioconda Novias y Fiesta, Classic Nouveau, Tornay, Spagnolo, Olimara, Jones New York, Rachel Roy, L´étude, LIE Live In Emotions y Río de la Plata. Tornay, regentada por Pilar Tornay, recibió el Premio a la Trayectoria que el pasado año recayó en Río de la Plata.

La Gioconda presentó sobre la alfombra azul de Larios trajes de fiesta y cocktail caracterizados por cortes asimétricos, vestidos de largos eternos, grandes complementos y los colores tierra como protagonistas. El turquesa y el verde se mezclaron con marrones, grises y rosa palo. Esta firma, muy conocida por sus trajes de novia, abrió el desfile con uno vestido llevado por la modelo malagueña Elisabeth Reyes.

Gioconda propuso una novia muy romántica, el blanco roto fue el color más visto y el escote de palabra de honor en telas de encaje y seda fueron las propuestas de la colección de esta casa.

Destacó también la colección que presentó Olimara, muy aplaudida por el público al igual que Spagonolo, una marca que ha tomado fuerza en los últimos años y que los malagueños han marcado como una de sus preferidas.

En cuanto a moda masculina destacó Clasic Nouveau por su elegancia, la americana es la reina de su colección.

El desfile de ayer fue un auténtico éxito a pesar de que el día se tornó bastante otoñal. Un gran despliegue de iluminación y de sonido hicieron de esta pasarela una de las mejores en sus tres años de vida. Los malagueños acudieron en masa a esta cita con la moda y desde primeras horas de la tarde la calle Larios ya era un hervidero de gente para coger un buen sitio y no perderse ni un detalle de las colecciones que las firmas presentaron.

Las tendencias iban dirigidas a público de todas las edades. Tornay se decantó más por los jóvenes y Río de Plata a los más mayores. Todo con mucho glamour malagueño. Un ambiente exquisito en el que nadie se quiso perder una de las citas importantes que Málaga tiene con la moda.

Una apuesta para apoyar el comercio. Este segundo día de moda fue una iniciativa que tuvo como objetivo apoyar al comercio malagueño proporcionando un espacio a las firmas comerciales donde pudieron mostrar las últimas tendencias y novedades de sus colecciones. Ellos fueron los protagonistas con un equipo de más de 150 personas que trabajaron para hacer de esta III edición un nuevo éxito. La pasarela contó con una alfombra azul de 350 metros de largo en la calle más emblemática de la capital. Una gran oportunidad para Málaga y los malagueños, así como, para todos aquellos visitantes que escogieron la capital y que pudieron disfrutar de la moda más local y de un ambiente único.