Unicaja quiso dejar ayer claro que su oferta de compra del Banco Ceiss es beneficiosa para los accionistas y bonistas de la entidad castellanoleonesa asegurando que su propuesta supone una valoración de esta entidad superior entre un 35% y un 43% a lo que indica su valor real de mercado, según los estudios realizados por las firmas de consultoría Oliver Wyman y AFI. Unicaja también detalló que, atendiendo a lo que Ceiss realmente vale de cara el mercado, los intereses nominales del 4% y del 6% que se les ofrecen en el canje de bonos otorgarán en la práctica a los que acepten su oferta rentabilidades anuales reales de entre el 13,9% y el 20,8% hasta el momento en que los conviertan en acciones de Unicaja.

No obstante, Unicaja -cuya junta de accionistas ratificó ayer lo aprobado el pasado sábado por el consejo de administración- introdujo ayer un matiz significativo en el hecho relevante que remitió a la CNMV. Hasta ahora, Unicaja condicionaba su oferta al hecho de que lograra un nivel de aceptación de un mínimo del 75% del capital de Ceiss y del conjunto de bonistas del mismo, a excepción hecha de los que son propiedad del FROB. Pues bien, ayer Unicaja matizaba que ese requisito «podrá ser dispensado» a su voluntad, «considerando las circunstancias concurrentes en el conjunto de la operación». El cambio obedece sin duda a la posibilidad de que muchos preferentistas decidan acudir finalmente a los tribunales ante la quita de valor que la oferta implica para sus bonos, y que se calcula en el orden del 71%. Con esta modificación, será Unicaja la que decida si el respaldo que logra su oferta une vez se lance es suficiente o no.

Unicaja, en todo caso, trató de mostrar ayer los atractivos de su propuesta y señaló que los tenedores minoristas de títulos -los famosos preferentistas, un colectivo de más de 30.000 personas- obtendrán una prima por encima del valor actual de Ceiss, algo que supondría para ellos «una mejora en el plano económico» y que «permitiría la continuidad» del citado banco como entidad.

Una oferta «transparente»

La entidad malagueña quiso aclarar que «con arreglo a su trayectoria de máxima transparencia», la propuesta para comprar Ceiss está sujeta a una aceptación «estrictamente voluntaria» por parte de los actuales tenedores de títulos de esta entidad y también «sometida al más riguroso cumplimiento de todas las exigencias y trámites administrativos, mercantiles y de información».

«La oferta de Unicaja posibilitaría configurar un grupo bancario de gran relevancia dentro del sistema financiero español, con posibilidades de expansión y crecimiento y gran potencial de futuro», apuntó el banco presidido por Braulio Medel. Unicaja define a Ceiss como una entidad «con gran arraigo territorial, especialmente en el ámbito de Castilla y León, con cuyo tejido económico y social se encuentra fuertemente imbricada», con una plantilla que supera los 3.500 empleados y con más de un millón y medio de clientes».

Según Unicaja, la oferta parte de las valoraciones de las dos entidades, «mediante las que se ha establecido una ecuación de canje entre las mismas».

En el caso de los titulares minoristas de bonos de Ceiss -los antiguos hibridistas que poseían acciones preferentes o deuda subordinada-, la oferta se concreta en dos tramos de títulos. Por un lado, de bonos necesaria y contingentemente convertibles que devengarían, hasta el momento de su conversión en acciones de Unicaja, a un tipo de interés del 6% anual sobre el valor nominal de los títulos de Ceiss, pero que en realidad equivale a un 20,8% anual sobre el valor de emisión (esto es, el valor real de mercado).

Por otro lado, los bonos perpetuos contingentemente convertibles darán un interés del 4% anual sobre el valor nominal de los títulos pero, de la misma forma, sería en realidad un interés del 13,9% sobre el valor de emisión.

Unicaja también destacó que cuando los bonos convertibles sean cambiados por acciones de Unicaja en junio de 2016, sus propietarios pasarán a tener el equivalente al 9% de la propiedad del banco malagueño, «con las ventajas que implicará ser accionistas de una entidad clasificada en el Grupo cero de entidades financieras por su solvencia, con una situación y una trayectoria de fortaleza financiera, que no ha recibido ningún tipo de ayudas públicas, lo que contribuirá positivamente al valor futuro de la acción del banco».

Ceiss dice a los suyos que la oferta es «atractiva» y «cierta»

Ceiss acogió ayer «con satisfacción» la aprobación por parte de la junta general de accionistas de Unicaja de la oferta de adquisición. Ceiss la «valora» al considerar que se trata de una alternativa «cierta» frente a otras salidas «desconocidas y arriesgadas para los tenedores de dichas acciones y bonos» (en referencia a los preferentistas que barajan acudir a los tribunales).

«Dichos clientes pasarán a convertirse en accionistas de Unicaja Banco, la entidad que lidera el ranking de solvencia en el sector financiero nacional», destacó la entidad, que añadió que el canje propuesto prevé una remuneración «atractiva» sobre el valor nominal de los títulos. Ceiss cree que las aclaraciones añadidas ayer por Unicaja arrojan «más luz» a estos titulares de acciones y bonos «frente a las manifestaciones y especulaciones realizadas en los últimos días».

Al mismo tiempo, subrayó que el proyecto garantiza la continuidad de Ceiss como banco regional, implantado principalmente en Castilla y León, Madrid y el norte de Extremadura. «Su viabilidad y solidez quedan garantizadas al formar parte del grupo Unicaja Banco», dijo.