El presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), Javier González de Lara, confía en que determinados sectores productivos estén ya en condiciones de poder generar empleo para jóvenes, auxiliados por iniciativas como el «bono joven» de la Junta de Andalucía, que ofrece 4.800 euros a las empresas durante el primer año de contratación de personas menores de 35 años.

«Algo se está moviendo dentro de todas las dificultades. Llevamos seis años de crisis y creo que se podría estar ya cambiando la tendencia», comentó González de Lara, que presentó a diversas empresas el «bono joven», acompañado de la delegada de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía, Marta Rueda.

El responsable empresarial lamentó el «altísimo» nivel de paro que sufren los jóvenes andaluces -58%, según la última EPA- pero confió en que algunas empresas puedan ya plantearse la incorporación de nuevos trabajadores, de cara a un próximo ejercicio donde podrían percibirse síntomas de recuperación. A lo largo de la crisis, Málaga se ha dejado ya un 16% de su censo empresarial y un 20% de su empleo, recordó el responsable de la CEM.

«Soy escéptico a corto plazo porque aunque la macroeconomía está bastante mejor, la microeconomía sigue sin reflejarlo. El consumo se mantiene bajo y seguimos viendo empresas que entran en concurso de acreedores. No obstante, los empresarios tenemos ganas de salir adelante y de generar actividad», comentó.

Por su parte, Marta Rueda recordó que el «bono joven» permite a las empresas recibir 400 euros mensuales durante el primer año de contratos de titulados universitarios, FP de primer grado o personas procedentes del programa «Segunda oportunidad» de la Junta de Andalucía. Si el trabajador pasa luego a ser indefinido, la ayuda de la Junta puede llegar alcanzar un máximo de 9.550 euros.

El dinero siempre se destina al empleador, en este caso la empresa, precisó Rueda, que consideró el «bono joven» como un incentivo para la creación de riqueza y empleo.

Según los cálculos de la Consejería, serán un total de casi 3.800 jóvenes desempleados andaluces los que podrán beneficiarse de este bono. Las 12 mensualidades de 400 euros se harán efectivas cuando formalicen el contrato de trabajo, y la cobrará la entidad como cesionaria del derecho a la ayuda. No obstante, si la beneficiaria viese extinguida su relación laboral por causas ajenas a ella misma, conservaría el derecho a la ayuda si formaliza otro contrato de trabajo en el plazo de tres meses, y seguiría teniendo derecho al bono hasta completar los 12 meses.

Entre los criterios de valoración que se han tenido en cuenta para conceder el bono puntúan en un 60% los procedentes del expediente académico; en un 20 por ciento la pertenencia a un colectivo preferente y otro 20 por ciento si el solicitante reside en un municipio incluido en las Zonas de Especial Atención para el Empleo Programa de Segunda Oportunidad.

La fecha límite para formalizar los contratos del «bono joven» es el 20 de noviembre.