Esta mañana, una trentena de alumnos de la Escula Taller de cocina de La Cónsula han realizado una acción protesta en la que han dado clases en el parking del centro. En un principio se ha preparado un acto reivindicativo en el que los profesores iban a dar las clases en dicho parking, pero después de unos minutos de espera en la entrada de la escuela, los profesores han rechazado hacer esa protesta.

A los alumnos se les ha aplazado el inicio del curso en varias ocasiones, en un principio debían haber iniciado el 10 de septiembre, luego lo aplazaron al 16 del mismo mes y por último hasta octubre. En los alumnos se percibe un sentimiento de cansancio debido a las promesas incumplidas y sinten mucha frustración, como comenta Rafael Morales, estudiante de cocina. "Estamos a medio camino, el año pasado

fue muy duro y aprendimos mucho, ahora queremos completar nuestros estudios".

La situación para otros estudiantes es más dramático. Es el caso de Abraham Nogales que tiene un piso alquilado porque viene a estudiar desde Sevilla. No es el único caso, remarca Antonio Morillas. Otros han tenido que rechazar trabajos porque esperan terminar el curso.

Por último, han terminado el acto repasando el temario y han abierto el libro de Teoría de la Cocina para dar una clase como estaba propuesto en un principio en la reivindicación, pero sin los profesores.