El malestar de los agentes del Real Cuerpo de Bomberos con las autoridades municipales aumenta día tras día. El último encontronazo se produjo el pasado fin de semana con motivo de la celebración de la Semana de la Prevención de Incendios, cuando según fuentes del Sindicato Profesional de Bomberos de Málaga (SPBM) los agentes que se encontraban de guardia se negaron el sábado a asistir a los actos convocados en la plaza de la Constitución con el vehículo R-1 «para que la seguridad de los parques de la capital no se viera comprometida» en caso de una urgencia real. «Estamos en total desacuerdo con las formas. No se puede detraer personal operativo que se encuentra de guardia para realizar la Semana de Prevención por mucho que el concejal de Seguridad, Julio Andrade, anteponga este evento a la seguridad», aseguraron desde el SPBM, y añadieron que el domingo sí se tuvo que trasladar un conductor con el camión hasta la plaza de la Constitución por recibir la orden directa de un superior provocada por el malestar que produjo la ausencia del día anterior en el Área de Seguridad.

Por este motivo, algunos agentes fuera de servicio aprovecharon el sábado para explicar a los ciudadanos que pasaban por la plaza de la Constitución «la verdadera situación» que se vive en el Real Cuerpo de Bomberos de Málaga.

El Sindicato Profesional de Bomberos viene denunciando en los últimos años «el deterioro» que sufre el cuerpo como consecuencia de la «falta de previsión municipal». Hace unos días, este diario dio a conocer la denuncia que el SPBM puso al Ayuntamiento en los tribunales por cómo la falta de mandos obliga a los agentes a realizar habilitaciones, es decir, cubrir guardias de trabajos de superior categoría, aunque entre sus demandas también aparece una plantilla que ya ronda una media de 50 años de edad y apenas 250 efectivos operativos.