La Policía Nacional ha detenido a un joven de 23 años de edad como presunto autor de un delito de descubrimiento y revelación de secreto ya que, supuestamente, utilizó la clave informática de su expareja para anular la solicitud de matriculación de ella en la Universidad de Málaga.

Las investigaciones comenzaron el pasado mes de julio, cuando los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de la UDEV de la Comisaría Provincial de Málaga conocieron que una joven había solicitado matricularse en la Facultad de Enfermería y que después alguien había accedido al sistema informático y había desestimado su solicitud, «causándole el grave perjuicio de no poder cursar sus estudios», según confirmó la Policía Nacional.

Los agentes especializados, tras las pesquisas realizadas, determinaron que el presunto autor había utilizado la clave informática de la víctima para acceder al sistema y desestimar la solicitud cursada. El joven, que ha sido identificado como la expareja de la víctima, supuestamente utilizó el ordenador de la entidad en la que trabaja para llevar a cabo los hechos. Según informó la Comisaría Provincial de Málaga, el atestado policial fue remitido al Juzgado de Instrucción número 3 de Torremolinos que instruye el procedimiento correspondiente por los hechos denunciados y esclarecidos.

Este caso recuerda al sucedido a finales de octubre, cuando el mismo cuerpo policial detuvo Málaga a una mujer de 26 años como presunta responsable de los delitos de daños, usurpación de estado civil y descubrimiento y revelación de secretos.

La investigación se inició en Fuengirola el día 7 de diciembre de 2012 a raíz de la denuncia presentada por una estudiante que manifestó que era alumna en la Universidad de Málaga y que tenía la posibilidad de hacer exámenes por internet. Para acceder a la cuenta donde estaban colgados los ejercicios, tenía que entrar usando un nombre de usuario, una clave y un número de expediente que sólo ella conocía. Aunque, cuando se conectó a través de su portátil para hacer cinco exámenes correspondientes a una asignatura, no pudo realizarlos porque alguien los había hecho en su nombre.

Las pesquisas llevaron a los investigadores hasta un domicilio de Estepona y finalmente hasta la expareja del titular de la vivienda, una joven con la que convivía en el mencionado domicilio cuando se produjeron los hechos. Los policías constataron que esta mujer fue compañera de piso de la denunciante en una época anterior y que durante el tiempo que compartieron piso llegó a conocer las claves de acceso de la víctima de las cuales hizo uso para realizar cinco exámenes de forma fraudulenta. Motivo por el que finalmente fue detenida como presunta autora de los delitos de daños, descubrimiento y revelación de secretos y usurpación del estado civil.