El cuarto rojo donde Anastasia Steele y Christian Grey han dejado volar la imaginación hasta límites infranqueables para muchos, donde las fustas, vendas para tapar ojos o esposas han sido las protagonistas de las escenas calientes más comentadas del panorama literario se acerca un poco más al ciudadano de a pie.

Una madre de dos mellizas de siete años y una pequeña de cinco ha montado su propia web con los productos oficiales de la trilogía erótica 50 Sombras de Grey y el público malagueño, no solo es su principal cliente a nivel regional, sino que se posiciona en el ranking de los tres primeros puestos de ventas en España.

Sin saber si será el clima o el qué, lo cierto es que Málaga juega, y no solo con la imaginación, a recrear las escenas más picantes de esta historia llena de sexo explícito y prácticas poco comentadas entre la población.

Fustas, bolas chinas, máscaras, vibradores, dilatadores, lubricantes, aceites, esposas, pinzas para pezones, sujeciones para no poder moverse de pies ni manos de la cama o antifaces, entro otros objetos, son los que se pueden adquirir en www.tienda50sombrasdegrey.com, la web oficial que lleva la sevillana Rosa Ramírez.

Los productos que más aceptación tienen entre sus clientes son las bolas chinas de metal y el vibrador estimulador «punto G». Productos especializados para el placer de la mujer pero que compran en muchos casos los hombres para regalar. Y es que, a pesar de ser una página pensaba para la mujer, con una estética elegante que aparta cualquier idea que pueda parecer grosera, tanto hombres como mujeres compran prácticamente por igual en esta web, con una escasa diferencia a favor para ellas, según detalló Rosa. Aun así, los productos que más adquieren los hombres son estimuladores y cuentas anales.

Todos los elementos que aparecen en la página han sido utilizados en algún momento por Grey en alguno de sus encuentros. Lo único que no es oficial y ha sido incorporado por la emprendedora son las máscaras, elementos que despiertan interés entre los más tímidos que quieren esconder su rostro o juguetones, que ven en ellas un artículo divertido con el que hacer algo diferente.

La idea de montar esta web surgió el verano pasado y a mediados de diciembre cumple su primer aniversario. Rosa era desde 2010 una más en la lista del paro, tras perder su puesto de trabajo en la banca. Diplomada en empresariales y con un máster en comercio exterior se lanzó a la aventura de volver a cursar otro máster sobre emprendimiento.

Casada con tres niños, esta sevillana de Coria del Río de 39 años en la actualidad comenzó a leer la trilogía cuando el gusanillo por montar su propio negocio se apoderaba de ella. No había terminado de leer los tres libros cuando su mente visualizó la idea de montar una tienda online que vendiera los productos que se utilizan en la trama. Una primera idea que desechó al conocer que salía la propia marca sacaba su línea de productos. «Preferí comercializarlos yo en vez de posicionarme como competencia», resumió Rosa.

Tras contactar con proveedores, el proyecto se hizo tangible y ya lleva casi un año de andadura. Las navidades fueron un buen comienzo y espera que este año sea igual. Todavía recuerda el primer pedido que le hicieron: unas esposas directas a Nueva York.

Para América del Sur también han partido gran parte de sus pedidos hasta que otro proveedor ha montado su tienda allí.

Fifty shows

La falta de personal y disponibilidad geográfica le hace limitar sus sesiones de tupper Grey. Reuniones con personas interesadas en conocer los productos que organiza Rosa cuando tiene un grupo no muy lejos de casa.

Uniformada de negro, con una máscara e incluso con té y pastas que invita a tomar y tienen el envoltorio de la tapa del libro discurre la sesión. Un ambiente serio y cómodo para explicar los productos y todos sus posibles usos. A pesar de lo que se pueda pensar, muchas de sus usuarias no han leído el libro pero conocen de qué va por toda la polémica suscitada.

Una cuestión que ha sabido aprovechar Rosa, que cuenta con el apoyo incondicional de su pareja, y espera tener algunos años más con los que aguantar en el mercado. El rodaje de cada una de las tres películas y su llegada a la gran pantalla es algo que deja respirar tranquila a esta emprendedora que, aunque también lo mira como un reto. «Será la prueba para saber si tuve una buena idea y supe gestionarla», explicó.