­Investigadores de los hospitales públicos de Málaga y de la Universidad (UMA), que pertenecen al Área de Neurociencias y Salud Mental del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA), han demostrado el papel clave de un lípido en la formación de neuronas durante el desarrollo embrionario cerebral y en el hipocampo del cerebro adulto, que abrirá nuevas vías de investigación para desarrollar en un futuro fármacos para el tratamiento de psicopatologías relacionadas con trastornos de ansiedad o déficits de memoria.

El eje central de la investigación lo constituye el ácido lisofostatídico, una pequeña molécula de grasa, muy abundante en la sangre, y de la que hasta hace un par de décadas apenas se desconocía su existencia, así como su papel determinante en el funcionamiento del cerebro.

Los estudios han sido realizados por el grupo de investigación que lidera el doctor Guillermo Estivill, del Clínico, donde participa el equipo de Luis Santín y Carmen Pedraza de la Universidad de Málaga.