La huelga de basura en Málaga ha finalizado pero su imagen navideña se ha visto empañada por más de 1.500 toneladas de basura en las calles de la ciudad, por lo que habrá que esperar unos días para que se recupere la normalidad y esté totalmente limpia.

Sin duda los más perjudicados han sido los comerciantes y los hosteleros, que ya al límite por la acumulación de residuos decidieron ayer contratar un servicio de recogida por motivos de salubridad, higiene e imagen de la ciudad.

Triste imagen se han debido llevar algunos turistas en sus primeros días de vacaciones tras observar montañas de basura y el olor de los residuos.

La suciedad de las calles y la tensión desde el primer día de huelga entre los trabajadores de la empresa de limpieza hacía prever que se desconvocaría pronto, pero se han necesitado cuatro días para que el comité de Limasa y el Ayuntamiento de Málaga alcanzaran un principio de acuerdo, hoy ratificado por la asamblea de trabajadores.

Anoche, el alcalde, Francisco de la Torre (PP), así lo anunció en su cuenta de twitter: "Principio de acuerdo en el conflicto de Limasa". Las partes han llegado a un acuerdo horas más tarde de que el regidor anunciara la contratación de empresas para retirar con urgencia los residuos acumulados en puntos críticos de la ciudad.

Esta medida fue tomada ayer por el alcalde de Málaga tras superar los 1.504 toneladas de residuos y debido a que había "graves problemas de seguridad y salubridad" tras cuatro días de huelga del servicio municipal de limpieza.

El presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte, ha valorado los acuerdos alcanzados sobre todo debido a que "han resistido todos unidos pese al chantaje y las presiones". Belmonte ha reconocido a Efe que ninguna huelga es positiva pero ha destacado que "con los trabajadores de Limasa no se juega" y en cualquier otra época del año también hubiese sido perjudicial la huelga de limpieza para la ciudad.

El acuerdo ahora adoptado contempla la congelación salarial, salvo en la antigüedad que se alargará en un principio hasta el 2015. También se recoge eliminar la paga de productividad y, en 2015, la paga de septiembre pasará de 920 euros a 1.200 euros.

Respecto a las vacaciones, se disfrutarán quince días entre mayo y octubre y 21 en la temporada invernal, mientras que la jornada laboral será de lunes a viernes.

A día de hoy, son muchos los que se preguntan si este tipo de conflictos deberían servir para demostrar a todos, que todos pierden, pero la que más, Málaga, cuya imagen turística se ha visto manchada por montañas de basuras en vez de bonitas estampas navideñas.