La UMA sigue perdiendo dinero. El presupuesto para el 2014, refrendado ayer por el Consejo Social de la institución académica, confirma la tendencia decreciente iniciada hace ya cinco años, coincidiendo con el periodo de crisis y las exigencias de austeridad impuestas por la Administración. Son cuentas de supervivencia y de defensa en un ambiente financiero poco favorable. Casi 219 millones de euros, un 2,8% menos que el pasado ejercicio. Y pese a todo, la partida destinada a becas aumenta, poniendo de manifiesto el compromiso de la Universidad por que ningún alumno tenga que dejar de estudiar por motivos económicos.

En total, según informó ayer la UMA en un comunicado, el importe destinado a becas se ha incrementado y asciende a 6.946.400 euros. Un esfuerzo, sin duda, procedente de recursos propios, ya que la financiación ajena vuelve a verse reducida. En los tres últimos años, la Universidad de Málaga ha visto mermadas sus cuentas en 36 millones de euros. Con respecto al pasado año, son 6,1 millones de euros. Y esto se nota a la hora de afrontar un ejercicio y plantearse objetivos.

La UMA admite abiertamente que el descenso de las partidas presupuestarias -a excepción de la destinada a becas- se debe, fundamentalmente, «al retroceso de las transferencias de la Junta de Andalucía principal fuente de financiación externa de las Universidades». En su discurso de inauguración del curso académico, aprovechando la presencia del nuevo consejero de Economía de la Junta, José Sánchez Maldonado, la rectora no tuvo reparos en exigir al Gobierno andaluz que se ponga al día con la deuda que mantienen. Adelaida de la Calle, sin embargo, no ha encontrado aún respuesta a esta solicitud, o al menos, ésta no se ha podido ver reflejada en los presupuestos, que ya aprobó el Consejo de Gobierno el 16 de diciembre, pero que no se hizo público hasta ayer, cuando recibió el visto bueno necesario del Consejo Social.

En cuanto a los recursos propios de la UMA, alcanzan la cifra de 41.190.937 euros. El resto, 177.719.085 euros, constituye la financiación ajena que recibe la Universidad para el ejercicio de su actividad.

En el capítulo de gastos, el mayor montante económico se lo lleva el apartado de Personal, con 145.293.749 euros, unos 43.000 euros menos que en 2013, aunque un descenso ni mucho menos tan brusco como el experimentado con respecto a hace dos años, cuando redujo esta partida en 7 millones de euros, motivado, fundamentalmente, por los recortes salariales y la aprobación de dos reales decretos que limitan y regulan, en primer lugar, la contratación de nuevos profesores asociados; y en segundo lugar, aumenta la dedicación docente de parte del profesorado titular. Además, para mantener la vinculación de todos los profesores a la Universidad, la institución tomó en su día la determinación de reducir la carga lectiva y la retribución económica a una parte de la plantilla.

Según la UMA, «se trata de un presupuesto equilibrado» diseñado para hacer frente a la situación económica poco favorable. Del mismo modo, destaca que la situación financiera de la UMA está saneada, no previendo para el próximo ejercicio cantidad alguna en créditos o prestamos bancarios.