El Colegio de Abogados de Málaga pretende acabar con las disfunciones de la Administración de Justicia que todos, ciudadanos y profesionales, han tomado como habituales. O, al menos, tratar de que no afecte a sus colegiados. Así, la institución elabora ya un protocolo de actuación para que sus letrados sepan cómo reaccionar cuando un juicio se retrasa porque se han señalado cinco o diez procesos en una sola mañana, el periodo de detención se prolonga innecesariamente o no hay fiscales en los partidos judiciales.

El decano de los letrados malagueños, Francisco Javier Lara Peláez, explicó a La Opinión de Málaga que el 16 de enero se reunirá con el presidente de la Audiencia Provincial, Antonio Alcalá, y los jueces decanos de los distintos partidos judiciales de Málaga «para ponernos a su disposición y buscar soluciones a los retrasos, a las esperas injustificadas porque se han señalado varios juicios en una mañana con una separación de cinco minutos entre uno y otro». «Se trata de buscar soluciones entre todos a estas disfunciones», apunta.

Una de las soluciones a las que se ha llegado, por parte del colegio, ante los retrasos es que el letrado espere 15 minutos de cortesía ante un retraso en el primer juicio de la mañana; tras ese periodo, el letrado puede irse, aconseja el decano. «Queremos que los abogados estén amparados por su colegio en este sentido», aclara.

Con el segundo o el tercer juicio, la espera, precisa el decano, ha de ser de 45 minutos. Fuera de ese periodo, el letrado podrá irse. Antes de hacerlo, deberá comparecer ante la secretaría del juzgado. «Éstas son las medidas que adoptará la Junta de Gobierno en ese protocolo si no se llega a una solución», precisa Lara, quien espera que de esa reunión resulte un principio de acuerdo que ayude a mitigar «las anomalías de la Justicia. «Creemos que son tiempos de espera razonables», indica.

El decano de los abogados también se queja de las detenciones de la Policía Nacional, policías locales y la Guardia Civil que se alargan más de lo necesario porque entre la comisaría o el cuartel y el juzgado de guardia, donde ha de comparecer el imputado, sólo existe una conducción a las nueve de la mañana.

«Imagínese que a un detenido a las nueve de la mañana se le cierra el atestado policial a las once, y a esa hora han terminado todas las diligencias. Como sólo hay una conducción a las nueve de la mañana al juzgado de guardia, se queda un día más detenido, cuando la Constitución establece claramente que el arresto deberá durar el tiempo mínimo imprescindible», reflexiona. Para ello, lo ideal, asegura Francisco Javier Lara, sería que hubiera al menos dos conducciones diarias desde los centros de detención a los juzgados de guardia de los diferentes partidos judiciales de la provincia. Esto ocurre, sobre todo, en los más pequeños. En la capital estos casos no se dan con tanta asiduidad.

En este caso, la respuesta podría ser incluso judicial, es decir, recurrir a los jueces para que pongan remedio. «Si es necesario, habrá que interponer denuncias. Una persona no puede estar detenida 24 horas más de lo previsto porque no hay un traslado o comunicación con el juzgado de guardia. La detención ha de producirse durante el tiempo mínimo imprescindible», aclara.

«El protocolo tiene un fin: que los abogados sepan cómo actuar ante diferentes situaciones con el respaldo de su colegio», apunta.

Otro problema que le preocupa al decano de los letrados malagueños es que en determinados partidos judiciales no hay fiscales. Éstos están en Torremolinos, Marbella y la capital de forma permanente, señala. Cuando se les requiere por el juez o una parte, se desplazan al juzgado de que se trate. «No están presentes en algunas ocasiones cuando se toma declaración al detenido, al testigo o a las víctimas. Sólo existe dotación de fiscales en Marbella y Torremolinos. En muchas ocasiones, los autos urgentes se mandan por fax a la Fiscalía de Málaga y el fiscal contesta por fax. Si se cree conveniente solicitar una prisión aparece el acusador público por primera vez. La Fiscalía ha de estar presente en los partidos judiciales», apunta el decano de los abogados malagueños. Por ello, Lara reclama que haya destacamentos de la Fiscalía en todos los partidos judiciales de Málaga. Todo ello lo planteará en otra reunión con el ministerio público sobre la que aún no hay fecha. Al respecto, se plantea incluso aconsejar que se pida la suspensión de un determinado juicio o comparecencia si no acude un fiscal.

Por último, su Junta de Gobierno también se reunirá el 9 de enero con los colegios de auditores, economistas y titulados mercantiles para elaborar un nuevo sistema de nombramiento de administradores concursales dados los problemas que han ocurrido con el actual método.