La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, María Gámez, criticó ayer que el Consistorio vaya a asumir la mitad del coste de las obras de remodelación que se deberán llevar a cabo en el Teatro Echegaray para solucionar los problemas de insonorización existentes.
Así, señaló que la «mala gestión» municipal «la pagarán los malagueños» y rechazó que el Consistorio devolviera el aval de 200.000 euros a la empresa constructora y ahora desembolse 85.000 euros «para afrontar las obras mal ejecutadas».
Todo ello, continuó la socialista, «pese al sobrecoste de tres millones de euros y una inversión final de ocho millones para hacer frente a las reformas necesarias para acabar con los problemas de ruido, existentes desde la inauguración».
Gámez lamentó el «despilfarro» del equipo de gobierno del PP en este teatro y criticó que no se hayan pedido «las correspondientes responsabilidades en este tiempo». Por ello, informó a los periodistas de que pedirá explicaciones en la próxima comisión de Cultura.
La portavoz socialista recordó que los vecinos de la zona cercana al Teatro Echegaray «llevan años soportando el ruido de las actuaciones y los que están dentro del teatro sufren el ruido exterior, caso de las campanas de la Catedral». «Pese a las constantes quejas y al compromiso del equipo de gobierno aún no se ha solucionado», insistió.
A su juicio, el equipo de gobierno destina «parte de la inversión municipal a hacer frente a obras que no les corresponden» e indicó que es «importante analizar en qué se gasta el dinero el Ayuntamiento de Málaga».
