CSIF asegura que la oferta de traslados que la Consejería de Educación ha planteado en la provincia de Málaga es ridícula. Desde su punto de vista, sólo contempla estabilizar una mínima parte de los puestos provisionales que hay en los centros. En conjunto, la Junta ha propuesto 350 plazas vacantes de las 2.427 plazas provisionales que hay en la provincia.

CSIF explica que Educación contempla un 8% en ESO (85 vacantes de las 993 plazas provisionales), un 19% en Primaria (261 de 1.355) y un 5% en FP (4 de 79). En este sentido, Ramoni Ruiz, presidenta del sector de Enseñanza de esta central sindical en Málaga, recordó que los puestos provisionales «sirven para cubrir necesidades puntuales de los centros educativos, pero no pueden constituir buena parte de la plantilla de funcionamiento».

El sindicato subraya que la exigua oferta anunciada por la Administración en la provincia incrementará la provisionalidad entre el profesorado, provocando que buena parte de los centros no cuenten con plantillas estables.

A juicio de la responsable de Enseñanza de CSIF Málaga, esta circunstancia «mermará indudablemente la calidad educativa, ya que el alumnado se expone en mayor grado a tener diferentes profesores para la misma materia».

Son demasiados los centros educativos en la provincia con entre tres y cuatro plazas provisionales de la misma especialidad en los que la Administración no ha anunciado ninguna vacante. «Este elevado número de plazas provisionales se explicaría si la Junta accediera a facilitar los datos sobre la evolución del alumnado, que en tantas ocasiones le ha exigido la comunidad educativa y en los que se escuda para no estabilizar plantillas», destacó Ruiz.

Asimismo, la responsable de CSIF Málaga señaló que el concurso de traslados anunciado por Educación «no supone una movilidad real» entre el profesorado malagueño, al tiempo que denunció «el tremendo perjuicio que esta planificación ocasionará al colectivo de docentes, que ven cómo la Junta de Andalucía continúa jugando con su destino». También subraya que una oferta tan ridícula vulnera derechos fundamentales del profesorado y amenaza el derecho de conciliación de la vida laboral y familiar.

Los más de 2.400 docentes en la provincia que ocupan un puesto provisional «están expuestos a la movilidad forzosa a causa del capricho de la Administración, que no piensa en la estabilidad de las plantillas», concluye.