Los Soho son barrios surgidos en las urbes y vinculadas al arte y la cultura y Málaga cuenta con uno de ellos nacido de los propios ciudadanos, pero su proyecto es cuestionado por algunos ya que está integrado en una zona anexa al puerto y vinculada al estraperlo y la prostitución.

El Soho de Málaga se encuentra en la zona conocida como Ensanche de Heredia, una ampliación del centro fruto de las necesidades de acercamiento al mar y al puerto de la ciudad de una antigua sociedad burguesa, que con el paso de los años ha sufrido una degradación urbanística.

El proyecto de los vecinos de crear un Soho se ha visto enfrentado con un barrio ligado a la prostitución, ya son muchas las personas que ofrecen servicios sexuales en pisos y club durante la noche, además la peatonalización no ha favorecido la creación de negocios en una zona donde que abundan los "sexshop", según los vecinos.

Para María del Carmen, que regenta una tienda de artículos eróticos, el proyecto no ha mejorado el rendimiento del barrio y según ella "ahora es más difícil encontrar aparcamientos y los alquileres han subido", la dependienta cree que el proyecto del Soho no acabará con la prostitución.

Lo mismo opina Jaime, un peluquero de una de las calles principales del barrio de las artes que según señaló a Efe que "con la calle peatonal no se va dejar de ejercer la prostitución, el ejemplo es la calle Montera en Madrid", sin embargo desde el Ayuntamiento han señalado a Efe que las normativas no permiten el ejercicio de estas actividades y que la Policía está muy presente en la zona.

El comerciante cree que los precios de los alquileres han subido "demasiado", por ello el barrio convive con edificios repletos con grafitis artísticos y carteles de negocios en alquiler o venta.

Es el caso de uno de los locutorios del barrio, ahora cerrado y con un cartel de "traspaso", donde se acerca un vecino de origen nigeriano a apuntar el número, el cree que no es buen sitio, pero el negocio de los locutorios también ha flaqueado en la zona, muy ligada a la inmigración por el bajo coste de sus viviendas.

El barrio convive estos últimos años con el fuerte crecimiento de iniciativas culturales como teatros, salas de exposiciones, galerías de artes y negocios de creatividad y publicidad, así como una amplia oferta turística y gastronómica, encabezada según la concejala del distrito, Gema del Corral, por el Centro de Arte Contemporáneo.

Del Corral, en declaraciones a Efe, ha destacado que el barrio ahora mismo "tiene una forma de convivencia distinta a la que ha tenido en los último años, pero siguen estando los negocios relacionados el sexshop", pero que es una oferta comercial que en principio no afecta negativamente al barrio".

"Aunque se ha aminorado muchísimo el número de personas que ejercen la prostitución en el barrio, es cierto que se intenta controlar a través de la Policía Local", ha manifestado la concejala quién ha apostillado que "poco a poco el barrio conforme vaya generando una oferta comercial alternativa y relacionada con el arte y cultura irá de una forma natural desapareciendo".

Por su parte, el director de la Sala de Teatro Chelamar, Claudio Navas, ha dicho a Efe que el objetivo es convivir, "como en cualquier ciudad del mundo, y más en los barrios culturales hay cabaré y puticlubes, hay que reordenar y convivir con esa realidad".

Claudio ha manifestado que el barrio ha sufrido una fuerte transformación y que vecinos, comerciantes y agentes culturales están haciendo el ejercicio de transformar culturalmente el barrio, que ya es parte de la oferta turística del centro de Málaga.