­El juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de la capital ha admitido a trámite una demanda contra el Ayuntamiento y contra Parcemasa, la empresa del parque cementerio de Málaga, por presunta «actuación negligente» de ambas en el traslado de los restos de un hombre, fallecido hace más de 20 años.

La demanda, interpuesta por un familiar del fallecido, reclama el abono de 93.000 euros «por daños morales» ante la posible actuación negligente de la empresa.

Los hechos que han dado lugar a la demanda se remontan a 2011, cuando un familiar de una persona fallecida acudió a las oficinas de la empresa para abonar el pago del nicho por un nuevo plazo de años.

El caso es que el cadáver llevaba unos 15 años en el nicho cuando la normativa señala que a los cinco años del enterramiento deben abonarse nuevas tasas para continuar en el mismo nicho o en caso contrario trasladarse al osario general.

Al haber transcurrido más de 15 años la empresa, después de notificarlo a los familiares, decide su traslado al osario general.

Es en ese momento cuando en 2011 acude a Parcemasa un familiar con la intención de abonar la tasa correspondiente para que el cadáver continúe en su nicho.

Aquí es donde se produce cierta desconexión entre los distintos departamentos de la empresa pues mientras uno estaba tramitando su envío al osario, otro departamento permitió el abono de la tasa para que este continuase en su lugar. Lo cierto es que, según explicó el propio gerente de Parcemasa, Federico Souvirón, cuando el familiar, tras pagar la tasa, acudió al nicho, este se encontraba ya vacío pues el cadáver había sido enviado al osario.

Durante meses, según explicó Souvirón, la empresa ha tratado de ofrecer al familiar una salida que diese solución al conflicto sin conseguirlo, por lo que finalmente la familia decidió interponer la demanda de la que ayer dio cuenta el gerente durante el consejo de administración de Parcemasa.

En la reunión del consejo de administración se dio cuenta igualmente de otro conflicto que se origina por la «deficiente gestión» que viene ofreciendo en los últimos meses la cafetería del recinto, gestionada en régimen de concesión por una empresa privada.

La concejala responsable de Parcemasa, Ana Navarro, explicó que la empresa viene recibiendo en los últimos meses las quejas de los usuarios por la «falta de limpieza, tardanza y deficiente servicio» que viene prestando la concesionaria.

De esta manera, Navarro explicó que se le ha dado un ultimátum a los responsables del servicio de cafetería para que impongan una mejora en la gestión pues en caso contrario el Ayuntamiento y Parcemasa promoverían la resolución del contrato por incumplimiento del pliego de condiciones y buscarían un nuevo concesionario que se hiciera cargo de la instalación.