­La movilización ciudadana contra las nuevas tarifas del agua, que ayer entregó en el Ayuntamiento de Málaga cerca de 37.000 firmas de ciudadanos en contra del sistema de tarifación, ha provocado que al alcalde, Francisco de la Torre, plantee una nueva rectificación para aumentar el número de litros que serán bonificados en el primer tramo de facturación.

El último compromiso por parte del Ayuntamiento y de Emasa era bonificar a todos aquellos clientes que manteniendo un consumo responsable de menos de 134 litros por día, la nueva tarifa les suponga un incremento en su recibo con respecto al sistema anterior, compensándoles con la diferencia. Pero ayer el alcalde introdujo una nueva variación.

Desde que se puso en marcha el nuevo sistema de tarifa y desde que comenzó la movilización ciudadana y de los grupos de la oposición contra esa tarifa, De la Torre ha modificado ya en tres ocasiones el sistema por la vía de aumentar el número de litros considerados como de consumo responsable. Así, cuando el sistema se puso en marcha la Empresa Municipal de Aguas (Emasa) anunció que el tope máximo de consumo responsable en Málaga era de 112 litros por persona y día. Apenas un mes después se produjo la primera modificación al anunciar que el tope se subía a 116 y sólo varios días después, el 5 de febrero, en el transcurso de un pleno extraordinario, hizo una nueva concesión al señalar que el tope se pondría en 120 o 135 litros por persona y día.

Apenas mes y medio después, De la Torre anunció ayer su compromiso de aumentar hasta un mínimo 134 litros y llegar incluso hasta los 150 litros por persona y día para no penalizar en ese tramo a las personas que vivan solas.

Este nuevo tope subvencionable, que se establecerá «en unas semanas» ya que depende de la instalación de un nuevo sistema operativo informático, supondrá la cuarta modificación del primer tramo de consumo, aunque el alcalde no quiso reconocer que se trataba de otra modificación encubierta de la tarifa.

El nuevo sistema tarifario (se paga ahora por personas y no por vivienda) contempla unos tramos de consumo más cortos que los anteriores. El primer tramo pasa de 5 metros cubicos (5.000 litros) por vivienda a 2 metros cúbicos (2.000 litros). Ahora, al subir hasta los 4.500 litros el mínimo subvencionado, el Ayuntamiento deja prácticamente sin efecto el tramo 1.

Al colocar el tope de consumo responsable entre los 134 y los 150 litros al día, el Ayuntamiento se instala en la media nacional que es de 142 litros por habitante y día, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De la Torre defendió que «la gran mayoría» de la población se beneficia de este nuevo sistema y el objetivo es «tratar de que los que aparentemente pudieran no beneficiarse, no se perjudiquen», creando «un círculo virtuoso».

A pesar de estas modificaciones, el equipo de gobierno volvió a defender el nuevo sistema de facturación de Emasa y rechazó de nuevo las dos mociones presentadas por PSOE e IU en las que reclamaban la modificación del actual sistema tarifario por otro, «más justo y sin arbitrariedades».

Los mociones se presentaban después de que momentos antes de iniciarse el pleno los responsables de la Iniciativa contra el Tarifazo hubiesen llevado al registro del Ayuntamiento 36.673 firmas. La portavoz de la Iniciativa Ciudadana, Dolores García, presidenta de Facua Málaga, precisó que, aparte de las firmas registradas ayer jueves, cuentan ya con otras 547 «y me consta que hay más». A su juicio, estas firmas y la manifestación del pasado domingo, con la participación de varios miles de malagueños, demuestran que «existe un rechazo generalizado» al nuevo modelo de facturación de Emasa.

En las mociones presentadas por IU y PSOE , se resaltaba «el rechazo social» suscitado por las tarifas del agua, por lo que, además de pedir su paralización, reclamaban que se consensúen las necesarias modificaciones, no en el sistema por habitante, que apoyan, sino en los bloques tarifarios, para adaptarlos así a la realidad de las familias y que no encarezcan el recibo del agua.