­El Ayuntamiento de Málaga va a saldar una deuda histórica con un grupo de calles del distrito Bailén Miraflores que a estas alturas del siglo XXI se encuentran a medio asfaltar o acerar, con zonas aún terrizas o aceras inexistentes. La red de saneamiento o distribución de agua es igualmente tercermundista.

En la barriada El Ciprés, cerca del antiguo Arroyo El Cuarto, hay aún un grupo de calles en pésimas condiciones de urbanización. Se trata de las calles Rodrigo de Narváez, Monchingo, México y Guatemala, todas ellas junto al campo de fútbol La Unidad, a las que por fin el Ayuntamiento va a dedicar dinero para ponerlas al mismo nivel que el resto de calles de la ciudad.

De esta manera, la Gerencia de Urbanismo, ha sacado a concurso el proyecto para la urbanización viaria de esas calles, lo que permitirá su pavimentación, creación de aparcamientos, así como la canalización de los servicios urbanos básicos en diversas calles de este distrito. Urbanismo destinará 749.964 euros a estos trabajos para los que se estima un plazo de ejecución de 6 meses.

Los trabajos se desarrollarán en dos fases; en la primera, contempla la construcción de nueva pavimentación que conecte estas cuatro vías respetando el planeamiento del PGOU y adaptado a las peculiaridades de las manzanas de viviendas y las pistas deportivas. La nueva pavimentación consiste en calzada, acera y aparcamientos en las propias vías.

Se procederá a prolongar la calle Guatemala hasta conectarla con la calle Rodrigo de Narváez con un cruce en forma de T, que garantice la accesibilidad y el tránsito adecuado de vehículos.

En la segunda fase se dotará a la zona de servicios urbanos, distribución de agua potable, instalación eléctrica y de telefonía, alumbrado público y jardinería. Además, la red de saneamiento será renovada por completo, eliminando las infraestructuras existentes e instalando nuevos colectores, pozos, absorbedores y acometidas para los domicilios. Como actuación previa a dichas fases, se realizarán movimientos de tierra para adaptar la superficie del terreno a las obras de renovación del pavimento y la dotación de nuevos servicios urbanos.

La nueva pavimentación para estas calles incluye acerados que cumplen la normativa vigente en cuanto a garantizar la accesibilidad en todo el trazado peatonal.

Se bajará el nivel de pendiente de las rampas, el acceso a los pasos de peatones estarán al nivel de la calzada, las aceras tendrán un espacio para el tránsito superior a los 1,2 metros de ancho y se utilizarán pavimentos antideslizantes.

La red de saneamiento se renovará totalmente, sustituyendo las infraestructuras existentes que han quedado obsoletas por colectores de PVC y renovando todos los pozos, absorbedores y acometidas domiciliarias. Está previsto también la renovación de la instalación de distribución de agua potable y disponer nuevos tramos de tuberías en aquellas zonas que aún no lo tienen.