El sindicato de enfermería Satse ha denunciado que el hospital Carlos Haya continúa con su política de no sustitución de bajas, lo que ha hecho «parchear» al personal que atiende las consultas.

En concreto, y según informó el responsable sindical en dicho hospital, José María de la Rosa, esta decisión está afectando a las consultas de hematología, cirugía cardiovascular y cardiología.

Según el sindicalista, la no cobertura de bajas está motivando que se mueva al personal de enfermería por las distintas áreas como si se tratara de las piezas de un puzzle, lo que hace que la atención no sea la adecuada al no tratarse de sus áreas de trabajo habituales. Además, este movimiento de profesionales hace que algunas consultas se queden desatendidas y que, como ocurrió ayer, una paciente viera cómo se cancelaba su prueba al no haber un enfermero que se ocupara de ella.

En concreto, todo comenzó hace unos meses cuando una auxiliar de enfermería que se ocupa de las consultas de hematología se dio de baja por estrés y la enfermera que estaba en dicha consulta tuviera que hacer la labor de ambas. Al incorporarse la auxiliar, la enfermera se dio de baja debido a problemas cardiológicos que han aflorado, según De la Rosa, por «tensiones». También explica que el hospital ha ido «parcheando» estos huecos y ha rotado a distintos enfermeros en ese hueco, aunque uno de ellos también ha sido dado de baja y se encuentra ingresado en el centro sanitario. «Ha llevado la carga de tres consultas, es una sobrecarga enorme», lamenta.

Consultas «desiertas» Además de los problemas en estas consultas, la situación se repite en la de cirugía cardiovascular. En esta área del hospital otra enfermera se dio de baja y la zona se ha quedado desierta. «Se desviste un santo para vestir a otro», lamenta De la Rosa, que critica que esta zona finalmente se cubrió con una enfermera de una de las consultas de cardiovascular. «Entonces en esta otra que se deja sin enfermera, se deja a una sola auxiliar», dice el sindicalista, que afirma que en esta que se queda «vacía» se llevan a cabo pruebas de envergadura para pacientes con problemas cardiacos, hasta el punto de que ayer mismo se canceló una prueba. Una mujer hospitalizada con una dolencia cardiaca, con las pruebas del preoperatorio ya hecho, vio ayer cómo le posponían una ecocardiografía transesofagica. «Denunciamos que la política de no sustitución de personal está abocando al personal a unos extremos que hacen que se den de baja unos tras otros por estrés», señala. «Con esto, el hospital está empezando a dejar de dar una prestación adecuada hasta el punto de tener que suspender hoy -por ayer- una prueba ya concertada».

Fuentes de la dirección del hospital aseguraron que ayer había personal suficiente para cubrir las áreas y que la prueba de esta paciente en concreto se canceló por motivos clínicos decididos por el cardiólogo y el neurólogo.

Además, indicó que en el centro sanitario se contrata en función de las necesidades del servicio y que el personal de cada unidad se cubre entre sí cuando se dan hechos puntuales como bajas por enfermedad.