La contestación social que recibió el cambio de sistema de tarificación del agua en la capital no tiene eco en según qué instituciones. El último en apoyar el cambio en el sistema de cuantificación del recibo, basado en el número de habitantes en lugar de por vivienda, ha sido el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, que en el informe anual de 2013 considera «oportuna y acertada» la tarifa que con tanta vehemencia ha defendido el equipo de gobierno del PP con el alcalde, Francisco de la Torre, a la cabeza. En general, no hay discrepancia sobre la nueva tarificación, sino sobre el precio del metro cúbico de agua.
El regidor dijo estar dispuesto a bañarse ante notario para demostrar que este sistema era mejor y que era difícil superar el tope de 7 metros cúbicos de agua por persona cada dos meses, que marca la diferencia entre pagar lo mismo que antes o abonar más.
«Desde esta institución queremos dejar claro que consideramos acertada y oportuna la decisión del Ayuntamiento de Málaga de cambiar su régimen tarifario para contemplar el consumo per cápita, teniendo en cuenta el número de personas que residen en cada vivienda», precisa Maeztu en su informe.
El Defensor del Pueblo Andaluz reconoce que esta modificación tarifaria ha motivado la tramitación de algunas quejas, y aclara: «Es normal que surjan dudas, se planteen situaciones injustas o aparezcan casuísticas no contempladas en la norma general».
Así, de hecho, ha ocurrido «en otras localidades andaluzas cuando se ha efectuado un cambio de régimen tarifario de esta trascendencia». En esos casos, los consistorios han solucionado las incidencias planteadas por los ciudadanos con correcciones y puntualizaciones en la norma general. «En el caso de Málaga, estamos convencidos de que las incidencias y dudas provocadas por el nuevo sistema serán solventadas por el Ayuntamiento a través de las oficinas puestas en marcha con tal motivo», precisa.
El portavoz municipal del PP, Mario Cortés, aclaró ayer que la postura de Maeztu viene a corroborar «lo que siempre hemos dicho: que todo cambio supone una transición, hay mucha casuística y hay que dar tiempo a que se solucione, para que la factura se asiente y los números sean correctos. El Defensor del Pueblo Andaluz apoya una tarificación más justa».
Cortés criticó a la oposición municipal, formada por el PSOE e IU, dado que, en su opinión, «han intentado movilizar a los colectivos contra el Ayuntamiento y no contra la tarifa». «Es un ahorro, sobre todo para quien consume menos de siete metros cúbicos cada dos meses, ese ciudadano paga lo mismo de antes».
La portavoz municipal del PSOE, María Gámez, aseguró ayer, por su parte, que no hay contradicción alguna entre la postura del Defensor del Pueblo Andaluz y la que defiende su grupo, puesto que Maeztu «no ha entrado en los precios de cada tramo. Sólo ha dicho que es bueno el sistema por habitante, que nosotros apoyamos y propusimos de hecho el cambio hace años; pero, sin embargo, no valora el precio del metro cúbico y los metros cúbicos asignados a cada bloque». Ello, en su opinión, perjudica a las familias monoparentales y a las parejas.
«Nosotros en lo que no estamos de acuerdo es en el precio del metro cúbico, y, por tanto, no hay contradicción alguna», señaló.
La viceportavoz municipal de IU, Toni Morillas, se expresó de forma idéntica a la de Gámez, e indicó que el Defensor «insiste en señalar la justicia del nuevo sistema tarifario por habitante; la discrepancia está en el establecimiento de los tramos». También recordó que IU apoya el cambio de sistema, que bendice el Defensor del Pueblo, como otras muchas organizaciones.
El Defensor del Pueblo Andaluz también llama la atención sobre «las dificultades que muchas familias tienen para hacer frente al pago del suministro de agua, tanto por los ingresos habidos en las tarifas del agua, como por los decrementos en los ingresos de la mayor parte de las familias provocados por la crisis económica».
