La Consejería de Fomento ha solicitado un informe jurídico que le permita sortear la inesperada paralización del proyecto del túnel del metro bajo la Alameda. La falta de respuesta del Ayuntamiento de Málaga, que por ley tiene que emitir un informe preceptivo sobre la adecuación de la obra al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), ha dejado en el aire los ya ajustados plazos de este proyecto.

Esta paralización ha puesto en cuestión la apertura obligada de la infraestructura completa para 2017, tal y como exige el Banco Europeo de Inversiones (BEI) si se quiere evitar un problema económico de grandes dimensiones con esta entidad de crédito.

El problema es que el Ayuntamiento tenía un mes para emitir un informe favorable o negativo al proyecto y si se ajusta al PGOU. El último día de plazo (a mediados de abril) se descolgó pidiendo más información técnica, dejando el trámite en el aire. La Consejería de Fomento quiere saber si no emitir el informe se considera como silencio administrativo -y la correspondiente aprobación automática- o si la petición de más información retrasa los plazos.

De fondo se encuentran dos elementos que alteran el acuerdo entre las dos administraciones firmado en noviembre. Por un lado, la petición del Ayuntamiento de Málaga de que el proyecto incluya la peatonalización del lateral sur de la Alameda y la extensión de ésta en el lateral norte, obligada por la estación de metro prevista a la altura de Torregorda.

La ampliación de la peatonalización supondría un sobrecoste de 6 millones de euros (un 12% del coste total del tramo), a lo que se niega la Consejería.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que las elecciones municipales serán en mayo de 2015, fecha en la que la parte norte de la Alameda -desde el Guadalmedina hasta Torregorda- estaría ya abierta en canal y existe temor en el Ayuntamiento sobre su impacto electoral, según fuentes municipales. Ya ocurrió algo parecido en 2007, cuando el Ayuntamiento retrasó el inicio de las obras del metro en la Carretera de Cádiz, exigiendo obras complementarias y estudios de tráfico, para que los trabajos no coincidieran con los comicios.

La actual paralización del proyecto de la obra entre el Guadalmedina y Torregorda puede tener su réplica en el trazado en superficie hasta el Hospital Civil.

Fuentes de la Consejería de Fomento confirmaron que el proyecto está prácticamente terminado y que antes de verano se presentará para iniciar el proceso de información pública y de impacto medioambiental.

Un responsable de Fomento reconoció que las reticencias iniciales del Ayuntamiento por este ramal del metro en superficie y la reciente experiencia con el túnel bajo la Alameda hacen temer que pondrá obstáculos para su aprobación, afectando a los plazos de inicio de la obra.