Dcoop asegura manejar ya «alternativas comercializadoras» para paliar su próxima salida de Deoleo, tras anunciar el pasado viernes que venderá su participación en la aceitera líder del mercado mundial. Fuentes de del grupo cooperativo malagueño reconocieron que Deoleo es una «herramienta muy importante» en su estrategia global para dar salida a la producción del grupo pero señalaron que existen otras «líneas de trabajo» que centrarán ahora su actividad.

La antigua Hojiblanca, que integró el pasado octubre a la granadina Tierras Altas, tiene intención de continuar con su proceso de «concentración de la oferta» a través de la incorporación de nuevas cooperativas y de diversificación de nuevos sectores que la conviertan en «la gran cooperativa agroalimentaria». De hecho, cuando se materialice su anunciada integración con Bodegas Baco y la que se trabaja con la caprina Procasur, Dcoop elevará su facturación actual de los actuales 600 millones de euros a un nuevo techo de casi 700.

«Todos estos planes estaban en marcha con o sin nuestra presencia en Deoleo. Es verdad que estar en esta empresa era un elemento importante porque tenía un canal de distribución ya hecho, pero somos productores de aceite y nuestro trabajo es buscarle salida al mejor precio posible. Buscaremos otros canales», comentaron. En cualquier caso, el director de Dcoop, Antonio Luque, ya recordó semanas atrás que la salida de Deoleo no implicaba que ambas no sigan manteniendo relaciones de compra y venta de aceite.

Dcoop, poseedora de marcas como Acorsa, Tierras Altas, Alisa o Musa, cuenta con delegaciones comerciales propias en China y Estados Unidos y mantiene una importante presencia en Japón con marcas como Cordoliva. En el ámbito comercializador, la cooperativa mantiene proyectos como Mercaoleo -una planta envasadora de aceite de distribución compartida el 50% con Cargill- o el acuerdo con Qoterba Internacional, también a medias con Aceites Toledo para almacenar y refinar aceite en una planta de Córdoba y albergar la fábrica de salsas de Musa. Además, posee el 40% de Tierras de Mollina, la comercializadora del vino de Virgen de la Oliva de Mollina.

La firma inyectará, una vez que se materialice la venta a CVC de su 9,6% de acciones en Deoleo, un capital que puede alcanzar los 43 millones de euros (Bankia venderá su 16% por 72 millones y BMN su 4,85% por 21,2). De momento, el acuerdo con CVC es para vender un 8,4% de las acciones, valoradas en 36 millones. El 1,2% podría venderse durante la posterior OPA que lance CVC o esperar a más adelante. Lo que sí se quedará en manos de Deoleo es la antigua marca Hojiblanca y su planta embotelladora, que fueron los activos con los que en su momento Dcoop entró en el accionariado. En cualquier caso, es un buen negocio, afirman en el entorno de Dcoop, ya que su valor contable era de unos 4 millones y la venta ahora de las acciones reportará más de 40.

«La marca Hojiblanca no la echaremos mucho de menos. Es muy conocida en España pero no tanto fuera. Y nosotros tenemos que ir a tierras vírgenes a vender el aceite, donde se comienza a trabajar desde cero», explican.

Por su parte, el director general de Dcoop, Antonio Luque, reiteró ayer que el Gobierno, si quiere, aún «está a tiempo» de que Deoleo siga siendo española. «Tanto BMN como Bankia necesitan la autorización de Hacienda y cuando la tengan procederán a la venta a CVC y nosotros haremos lo mismo. Se está a la espera de esa autorización, pero todavía no hemos vendido. El acuerdo está condicionado a esa venta por parte de las entidades financieras», explicó Luque a Gestiona Radio. En principio venderán el 8,6% de su participación al precio de 0,38 euros por acción «y luego veremos ya qué hacemos con la otra parte».

Insistió, además, que se han decantado por vender a CVC porque la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) no se ha puesto en contacto con ellos «en ningún momento».

«Es más, si el Gobierno tiene interés en comprar todavía puede hacerlo. Puede comprar la parte de Bankia, por ejemplo, y nosotros estaríamos entonces dispuestos a comprar la parte de BMN y ampliar capital si fuera necesario y buscar solución a la refinanciación de la compañía», subrayó.

El ya exministro de Agricultura y candidato a las europeas del PP, Miguel Arias Cañete, apostó ayer de nuevo por que la SEPI asuma una participación en Deoleo para que haya «una voz española que sea la voz de la conciencia de que tenemos que exportar y ser líderes mundiales» y abra la venta del aceite en Estados Unidos.