Vallas a lo largo de una calle, o rodeando un pequeño socavón en la acera. Jerseys delimitando la calzada, carriles bici sin terminar, zanjas abiertas a la espera de que se plante una zona ajardinada, baches en la calzada y pintura amarilla en las señales de tráfico, que indican la provisionalidad por obras. Este es el panorama al que se enfrentan diariamente los vecinos de Juan XXIII y las calles del entorno, debido a que Metro Málaga no ha terminado las obras de reposición de las vías afectadas por las obras del metro.

El Ayuntamiento de Málaga decidió sacar ayer la artillería para criticar la gestión de Metro Málaga y la Consejería de Fomento, acusándoles de retraso en la ejecución de estas obras «que son de poca cuantía, pero impiden que los vecinos vivan con normalidad», indicó el concejal de Movilidad, Raúl López, que compareció acompañado de las ediles de la Cruz del Humilladero y el Centro, Teresa Porras y Gemma del Corral.

López lamentó el retraso acumulado en muchos de los tramos de la línea 1, que a pocos meses de su inauguración siguen sin terminar las obras de reposición en la superficie. Así, relató, entre las actuaciones pendientes, la mejora de la calzada y la señalización definitiva de tráfico en La Unión; los pasos semaforizados en el Camino de San Rafael; las medidas de calmado del tráfico en las calles Reboul y Agustín Martín Carrión; la zona ajardinada en la calle Paul Dukas o la fuente de Barriguillas en la plaza José Bergamín. Eso sin contar con el carril bici construido sólo con tramos inconexos en la avenida Juan XXIII, donde hay zanjas sin cerrar, o la falta de señalización definitiva en Herrera Oria, entre otras medidas.

«Hace un año hablamos con Fomento para terminar estas obras y así hemos dado todas las autorizaciones pendientes, pero no han terminado muchos trabajos», relató Raúl López, quien insistió en que «son fundamentales para el tráfico, el comercio y para el día a día de los vecinos».

La concejala de la Cruz del Humilladero insistió en la necesidad de que se le ofrezca «una prioridad máxima» a estas obras «para que los vecinos puedan hacer una vida normal». «No pedimos nada extraordinario, sólo que lo dejen como estaba», indicó Porras.

Gemma del Corral, por su lado, recordó el cierre de comercios producidos en Callejones del Perchel por el retraso de las obras de construcción del metro.