El Ayuntamiento de Málaga, ha adjudicado ocho espacios públicos para la celebración de mercados artesanales los domingos.

Habrá seis adjudicatarios que se encargarán de la celebración de mercados en ocho ubicaciones que se han elegido de forma consensuada con los distritos y de acuerdo a sus peticiones, como son la calle Quitapenas, Navarro Ledesma, plaza de la Merced, calle Pirita, playa de Pedregalejo, calle La Serna, paseo marítimo Ciudad de Melilla y paseo marítimo Antonio Banderas. Una de ellas, la de la plaza San Pedro de Alcántara, ha quedado desierta. Estos mercadillos artesanales se celebrarán una vez al mes en horario de 11.00 a 19.00 horas de forma ininterrumpida.

El adjudicatario será responsable de la selección de los artesanos y la organización e instalación de los puestos, sin perjuicio de que el Ayuntamiento se reserve el derecho a fiscalizar dicha gestión y rescatarla o suprimirla por motivos de interés público, según fuentes municipales.

La cantidad recaudada por el Consistorio se destinará íntegramente a sufragar acciones encaminadas a la promoción del pequeño y mediano comercio de la ciudad, según apuntaron. Además, en cada uno de los mercados artesanales se reservarán dos puestos que quedarán a disposición del área de Derechos Sociales, que podrá autorizar su cesión a colectivos que lo demanden.

La concejala de Promoción Empresarial, Ana Navarro, subrayó que con este procedimiento «se regula y ordena la celebración de este tipo de eventos que gozan de una evidente demanda por parte de ciudadanos y de las propias asociaciones de comerciantes».

En estos mercados, a diferencia de los mercadillos, únicamente se permitirá la venta al por menor de productos artesanales; es decir, aquellos productos de autor que sean singulares por su origen o proceso de creación o transformación.

En este sentido, podrá llevarse a cabo la venta de alimentos artesanos típicos de la agricultura y gastronomía malagueñas, aunque quedará prohibida la instalación de puestos dedicados a actividades hosteleras, así como la celebración de actividades musicales o pasacalles.

Las estructuras de los puestos serán de jaimas o similar con una altura libre mínima interior de tres metros, el material de revestimiento será de color blanco liso y se garantizará, entre otras cosas, que la zona de uso público cumpla las exigencias en materia de accesibilidad. En total, cada mercadillo podrá ocupar una superficie máxima de 500 metros.