­Unicaja celebró ayer en Málaga su primera asamblea general tras la adquisición del Banco de Caja España-Duero (Banco CEISS) por Unicaja Banco, en la que se aprobaron por unanimidad todos los puntos del orden del día, según informaron fuentes de la caja a este periódico, que destacaron además el respaldo de todos los miembros de la asamble a la gestión de la entidad financiera en el último año y a la labor de la Obra Social.

De hecho, durante la asamblea también se informó del presupuesto cerrado de la Obra Social de Unicaja durante 2013, que se ha situado entre las tres primeras del país después de cerrar el pasado año con la realización de 2.460 actividades y un alcance de más de 2,2 millones de beneficiarios, en las que se ha priorizado el área social y asistencial.

Según los datos aportados ayer, la Obra Social en 2013 se cerró con una liquidación de gastos en torno a los 32 millones de euros (cifra ligeramente superior a los 30,4 presupuestados) y se han realizado acciones o proyectos en 281 municipios. La asamblea subrayó el esfuerzo realizado por Unicaja Banco en su aportación a la Obra Social, en un contexto general del sector de estrictos requisitos de capital y solvencia y de menores márgenes financieros.

La entidad, según explicó en un comunicado, valora el impacto en el PIB nacional de la Obra Social de Unicaja en unos 60 millones de euros, lo que supone el sostenimiento de más de 1.500 empleos directos e indirectos.

Dentro de los 149 centros que mantiene, la Obra Social de Unicaja cuenta con colegios propios de enseñanza primaria y secundaria, residencias para mayores, bibliotecas, guarderías, museos, centros de ocio y culturales, salas de exposiciones, salas de música y colonias infantiles.

El año 2013 estuvo marcado por las colaboraciones con asociaciones solidarias como Bancosol, a quien Unicaja respaldó en la Gran Recogida de Alimentos como patrocinador principal y con la participación de más de un centenar de empleados de la entidad financiera como voluntarios. En torno al 70 por ciento del presupuesto corresponde a la obra propia y sobre un 30 por ciento a obra en colaboración, con el objeto de ampliar el alcance de las actuaciones.

Marco financiero

En la asamblea se aprobó también que Unicaja redujera su porcentaje de participación en el capital de Unicaja Banco del cien por ciento al 90,8 por ciento como consecuencia de la compra del Banco CEISS, mientras que el 9,2 por ciento restante quedará en manos de inversores institucionales.

Con el cierre de esta operación, el Grupo Unicaja se convierte en el séptimo grupo bancario español y el tercero procedente de cajas de ahorros, con unos activos totales próximos a los 75.000 millones de euros. En lo que respecta a la caja de ahorros, la entidad malagueña cerró 2013 con unos fondos propios de 2.500 millones de euros, «lo que garantiza la continuidad de su misión como cabecera de un grupo solvente y comprometido con los intereses de sus territorios y de la sociedad en la que opera», informó la entidad en un comunicado.

Un portavoz de Unicaja señaló a este periódico que durante la asamblea se resaltó por todos los presents que ante el panorama de reconversión del sistema financiero español resultante de la crisis económica, «Unicaja mantiene sus señas de identidad y sus fines como caja de ahorros».

En este sentido, el Grupo Unicaja cerró el ejercicio 2013 como una de las entidades con mayor nivel de solvencia del sistema financiero español, concretamente con un coeficiente Common Equity Tier 1 Basilea III (recursos propios de la máxima categoría) del 12,4 por ciento «fully loaded» (bajo el supuesto de aplicación inmediata).

El portavoz de Unicaja explicó que la asamblea también apostó por que la entidad mantenga «su compromiso y responsabilidad social con los clientes» y destacó que «no ha emitido ningún tipo de participaciones preferentes y ha llevado a cabo un enfoque de gestión personalizada de los clientes, con una gama de servicios sustentados en los nuevos canales, ajustados a los estándares de seguridad y calidad».

En cuanto al desarrollo territorial, la entidad subrayó que ha apoyado de forma continuada al tejido empresarial, aportando una financiación a pymes y a autónomos que arroja un saldo superior a los 3.000 millones de euros. Igualmente, ha suscrito nuevos convenios para la canalización de financiación crediticia y de colaboración con las sociedades de garantía recíproca, a fin de intensificar dicha labor de apoyo al tejido productivo y al emprendimiento.

Por otra parte, la entidad destaca el hecho de que en un momento en el que la mayor parte de las entidades financieras se ha desprendido de sus participaciones empresariales, Unicaja las mantiene en sectores considerados «tractores» de la economía andaluza, tales como la aeronáutica, la agroalimentación, infraestructuras, servicios públicos, energía, sociedades de capital riesgo o turismo.