La Protectora de Animales de Málaga señala hoy que la alerta que difundió a través de las redes sociales, en la que informaba de un presunto sabotaje en la playa canina de Totalán, por la que supuestamente alguien habría envenenado a cinco perros, es una falsa alarma. Esta organización había transmitido el miércoles a través de Twitter el siguiente mensaje, haciéndose eco de denuncias de algunos usuarios: «¡Peligro! Están echando veneno en la playa de perros de Totalán. Ya son cinco perros envenenados». Esta alerta fue acompañada del mismo modo con un aviso a las autoridades municipales, que rápidamente se pusieron manos a la obra.
En la mañana de ayer, agentes de la Policía Local de Málaga peinaron la playa por si encontraban algún indicio de que, efectivamente, se había producido este envenenamiento. Fuentes municipales precisaron, como ha informado hoy La Opinión de Málaga, que esta búsqueda había resultado infructuosa y no se había localizado ningún alimento envenenado, posiblemente salchichas, ni nada relevante.
La presidenta de la Protectora, Carmen Manzano, explicó que, según las informaciones que había recibido, la nueva playa canina, inaugurada por el Ayuntamiento de Málaga el pasado 15 de junio justo antes de llegar a Rincón de la Victoria, podría estar siendo objeto de un siniestro sabotaje, hasta el punto de que podría haberle costado la vida a cinco perros, que habrían sido presuntamente envenenados. Si bien se ha confirmado la muerte de estos cánidos, no se ha podido comprobar que se haya debido a una intoxicación alimentaria.
Por este motivo, y tras averiguar que no existen pruebas que demuestren esta teoría, tras la actuación de la Policía, que según Manzano, actuó con una gran celeridad y diligencia, la Protectora apaga las luces de alarma.
