­El Congreso de los Estados Unidos va a contar con un retrato del general malagueño Bernardo de Gálvez, una figura clave en la independencia americana. Por eso, en el discurso inaugural del Foro España-EEUU, que se celebra desde ayer y hasta el domingo en Marbella, el Rey Felipe VI destacó la figura del militar de Macharaviaya como símbolo de unión entre los dos pueblos.

«Debemos rendir un sentido homenaje a la figura del malagueño Bernardo de Gálvez, un insigne español cuya aportación a la independencia de los EEUU fue crucial y cuya historia es en la actualidad cada vez mejor conocida», precisó, para incidir luego en que el reconocimiento a su memoria y obra «contribuirá a enaltecer tanto la riqueza y la diversidad que alberga la identidad estadounidense, como la historia compartida por nuestros dos países, y la solidez de las raíces que la comunidad hispana tiene en Estados Unidos».

Felipe VI, que presidió la mesa junto a su esposa, la reina Letizia, y la presidenta de la Junta, Susana Díaz, se ha sentido muy unido a este foro, que celebra en esta ocasión su décimo novena edición, y reconoció que este año es muy especial, porque es la primera vez que asiste como monarca. Pero ayer celebró otra primera vez, ya que él y su mujer se estrenaron como monarcas en la ciudad, al tratarse la primera visita ya como Reyes de España.

En este foro se van a abordar, entre otros, aspectos como el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Europa, los retos de la seguridad internacional, amenazada ahora en Oriente Medio y Europa del Este, y la educación. Por ello, insistió en la necesidad de que ambas naciones muestren «su firme voluntad de impulsar proyectos comunes» en el ámbito económico, de tal forma que la inversión norteamericana crece en este país y 700 empresas españolas crean riqueza al otro lado del Atlántico.

Defendió la capacidad de adaptación e internacionalización de las sociedades españolas, «un activo extraordinario del país y de nuestra economía» en el mundo, y abogó por la cooperación militar, «muy conscientes de los riesgos y los desafíos».

Reseñó los progresos conjuntos en educación, ciencia y cultura, con el papel del Instituto Cervantes, y declaró «la madurez y riqueza» de las relaciones bilaterales. «Si el lema que figuraba en el escudo de Bernardo de Gálvez era Yo solo, el nuestro ha sido, es y debe seguir siendo nosotros, juntos».

Tuvo palabras de cariño para Málaga, «destino español de calidad para el turismo y la inversión empresarial global». «Málaga nos acoge con el dinamismo y el carácter abierto que la caracteriza, con su entorno y clima que tanto nos recuerda a la California que nos acogió el año pasado».

Amplia representación

La cena se celebró en las salas de Tabacalera dedicadas al Museo del Automóvil y entre las personalidades locales que asistieron había una amplia representación del empresariado malagueño -los presidentes de Mayoral y Famadesa- y andaluz -estaba el presidente de los empresarios andaluces, Javier González de Lara-, así como de la vida política y social de la ciudad: el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, la rectora de la UMA, Adelaida de la Calle, el alcade, Francisco de la Torre, y varios concejales, entre ellos Julio Andrade. También asistieron los ministros de Industria, José Manuel Soria, y Defensa, Pedro Morenés. Hubo aplausos a la llegada de los Reyes. Fuera, mucha seguridad y escasa expectación.

Antes, el presidente de la Fundación Consejo España-Estados Unidos, Juan María Nin, que por la tarde inauguró el evento en Marbella, señaló que la recuperación demuestra que fundaciones como la que él dirige son importantes «para paliar los daños sociales de la crisis, y vamos a poner el foco en los jóvenes y el empleo», e insistió en la importancia de analizar el acuerdo de libre comercio entre los dos países.

"Puentes transatlánticos"

Tim Kaine, presidente del United States-Spain Council, resaltó la importancia de que España y Estados Unidos se alíen para hacer frente a los desafíos globales como la recuperación.

En la sesión inaugural, celebrada en el Hotel Don Carlos de Marbella, los expertos hicieron hincapié en que España es esencial para tender puentes transatlánticos en un contexto «cada vez más interconectado e interdependiente».

El ministro de Industria, José Manuel Soria, y el presidente de Iberdrola participaron en la sesión inaugural para analizar los retos globales del sector energético y su impacto en las dos naciones. Morenés intervendrá en relación a la seguridad internacional, y uno de los ponentes en cuanto al acuerdo de libre comercio será el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz.