­La joven de 20 años que denunció haber sido violada por cinco chicos, tres de ellos menores de edad, la pasada Feria de Málaga, se conformó a mediodía de ayer con una pena de diez meses de prisión y una multa de 2.260 euros por cinco delitos de denuncia falsa que a cada uno de los supuestos agresores le habría supuesto una pena superior a cinco años de prisión. La Opinión de Málaga ya adelantó la semana pasada la existencia de un acuerdo verbal entre las acusaciones y la defensa de la joven para no pedir más de dos años de cárcel y renunciar a la indemnización en vía penal, aunque alguno de ellos podría plantearse acudir a la vía civil para reclamar. De la misma forma, este diario anticipó el sábado que la joven iba a ser enjuiciada en un juicio rápido hoy martes, ya que el Juzgado de Instrucción número 2 de la capital tenía funciones de guardia. Sin embargo, la juez María Luisa Cienfuegos, para evitar la presencia de medios de comunicación, hizo llamar a las partes a media mañana de ayer y fijó el juicio rápido a la una de la tarde, acto en el que la menor se conformó con la pena solicitada por la Fiscalía y con lo pedido por las acusaciones particulares, lo que le evitará ingresar cárcel.

Esta es la figura jurídica de la conformidad, que le acarrea una rebaja de un tercio en la pena, y otra cosa es el acuerdo verbal previo de los abogados para pedir menos de dos años de cárcel. La renuncia a la indemnización en vía penal le permite también a la menor eludir la cárcel, pues su pago es conditio sine qua non para que se le suspenda la condena.

La denunciante, que alegó que denunció la agresión sexual por miedo a la difusión del vídeo grabado con un teléfono móvil por uno de los chicos, no podría hacer frente a pago alguno pues es insolvente. En la resolución, la magistrada considera probado que la chica, «a sabiendas de su falsedad», comunicó sobre las 8.30 horas del domingo 17 de agosto a la Policía Local que cinco jóvenes de etnia gitana a los que no conocía previamente la habían agredido sexualmente tras amenazarla de muerte. Según dijo entonces, «todos comenzaron a tocarle sus partes íntimas forzando a la misma mientras ésta se negaba continuamente».

En la ampliación de la denuncia ante la Policía Nacional, la joven añadió detalles hasta el punto de individualizar «los roles de los supuestos agresores e incluso manifestó haber sido víctima de un delito de robo con violencia por parte de los mismos». Sin embargo, la juez asegura que la chica incurrió en contradicciones cuando ratificó la denuncia en el Juzgado, lo que se unió a las declaraciones de los testigos directos, las periciales forenses (reconocimiento médico y toxicológico) y la reproducción de los archivos rescatados del móvil de uno de los jóvenes (fotografías y vídeos).

Tras comparecer ante la juez, los tres detenidos mayores de edad quedaron en libertad imputados por violación y robo con violencia, además de dictárseles una orden de alejamiento de la víctima, aunque al día siguiente se decretó el archivo provisional del caso.