­Los complejos sanitarios Carlos Haya y Clínico cuentan desde ayer con un nuevo gerente. La Consejería de Salud anunciaba ayer el cese de Carmen Cortes y el nombramiento de José Luis Doña. Salud quiso recordar que la designación supone una apuesta por la excelencia profesional dentro de la estrategia del Servicio Andaluz de Salud (SAS) de dar peso a los profesionales en la gestión sanitaria, dado que ha ejercido, durante nueve años, como subdirector médico en el centro sanitario que ahora pasa a dirigir.

La hasta ayer directora del centro sanitario se va tras dos años y tres meses de gestión marcados por un conflicto cuasi permanente con los sindicatos y los trabajadores, que le han acusado de opacidad y oscurantismo. Los tiempos en los que le tocó dirigir la mayor empresa de Málaga, con 8.000 trabajadores y 550 millones de euros anuales de presupuesto, no han sido fáciles, y Cortes se ha topado con tensión a causa de la coyuntura económica en el seno de sus hospitales.

A los poco más de tres meses de haber accedido al cargo, Cortes se enfrentó a la difícil tarea de la fusión del Clínico y Carlos Haya. Llevaba desde junio dirigiendo este último junto a sus compañeros de complejo del Materno, Civil y Care, y sumó el hospital de Teatinos y el Marítimo.

Recién llegada, también debió enfrentarse a la implantación de los contratos al 75% de los profesionales eventuales. Esta medida, tomada por la anterior consejera de Salud, María Jesús Montero, será eliminada en cuestión de poco tiempo tras el anuncio de la actual responsable de la cartera, María José Sánchez Rubio, de querer recuperar el 25% que más de 1.500 profesionales malagueños perdieron en sus nóminas y cotizaciones.

Pero el encierro de una veintena de trabajadores y delegados sindicales en su despacho en Carlos Haya le hizo tambalearse y le valió algún tirón de orejas. Los sindicatos acudieron a su despacho para negociar la implantación de las 37,5 horas semanales impuestas por el Gobierno a los empleados públicos. Pero no les atendió y estos se encerraron en señal de protesta. Fue la peor de sus gestiones, confirman todos los agentes sociales, que lamentan que durante 72 horas tuvieran que tomarle el pulso ante su negativa a tratar la aplicación de las dos horas y media más por semana.

También han sido conflictivas la gestión de las guardias en las urgencias de Carlos Haya con los médicos residentes y la saturación de la Observación en el Clínico, que la han enfrentado con médicos y le han cuestionado a nivel social.

Uno de los puntos negros más recientes fue la gestión de un caso de sospecha de ébola. Los trabajadores denunciaron no contar con un protocolo específico y lamentaron haber corrido riesgos, toda vez que las decisiones -y la responsabilidad- corrieron a cargo de los facultativos que trabajaron aquellos días. También le afearon la falta de información y la opacidad en el caso.

Pero si ha habido algo que ha fallado en la gestión de Cortes ha sido la falta de diálogo y de información a sus 8.000 trabajadores. Desde que accedió al cargo, los sindicatos y la junta de personal que representan a los sanitarios han criticado que Cortes no les atendiera y que para poder debatir cualquier asunto hiciera falta pedir cita. La han tildado de hermética, de poco dialogante y de falta de transparencia. Motivos que distan de la actual directiva de Salud, que destaca por su transparencia y que podrían haber llevado a la propia presidenta, Susana Díaz, a prescindir de esta y a optar por una persona con otras cualidades como José Luis Doña.

Valga como ejemplo que al día siguiente del encierro en Carlos Haya de la junta de personal la gerente cogió sus bártulos y se mudó al Clínico, más cómodo sindicalmente hablando.

Los sindicatos aplaudían ayer la decisión de la destitución, aunque Salud quiso referirse a un relevo y no a un cese. El presidente de la junta de personal, Juan Antonio Torres, manifestó que esta gestión ha sido difícil desde el punto de vista de la crisis y los recortes. «Y además, nos hemos encontrado con una dirección que venía de no tener contacto con los trabajadores. Tenía a dos o tres personas que daban la cara pero nunca se enfrentó a los conflictos, ni con los sindicatos ni conmigo», criticó.

El también responsable de CCOO en el complejo sanitario señaló que ha sido la gerente más cerrada y menos comunicativa de los últimos años, algo en lo que coincide el secretario del sindicato de enfermería Satse, Eugenio Pérez. «No ha contado con los trabajadores para nada, y son importantes desde su punto de vista como trabajadores y como usuarios», señaló. Además, destacó que su gestión al frente de la fusión ha sido poco productiva. «Se ha perdido la sana competencia entre centros y no ha redundado en el beneficio de los usuarios», dijo, al tiempo que pidió que se dé marcha atrás en esta medida.

Su homólogo en UGT, Ramón Sánchez Vicioso, considera que aunque la tarea a la que se ha enfrentado Cortes no ha sido fácil, podía haberlo sido más de contar con los sindicatos y los trabajadores. «Ha habido muchas situaciones enquistadas por no contar con los trabajadores y los sindicatos. En eso han fallado», destacó. Desde CSIF, Antonio Osorio tildó la gestión de Carmen Cortes de deficitaria y la resumió en un «cúmulo de errores».

El delegado del Sindicato Médico en Carlos Haya Diego Martín, aún sorprendido por la noticia, lamentó que hablar con Cortes era complicado y dijo que espera que el nuevo gerente sea más dialogante. De hecho, todos los sindicatos coincidieron al afirmar que José Luis Doña tiene aptitud y actitud. Prueba de ello es que ayer mismo se dio un paseo por las urgencias de Carlos Haya para ver en primera persona cómo se encontraban. Ahora, deberá enfrentarse al conflicto de las matronas del Materno, la ambiciosa reforma de las urgencias y los contratos al 75%.