Los once parques tecnológicos andaluces han continuado, pese a la crisis, con la trayectoria de crecimiento y facturaron el pasado año 4.800 millones de euros, un 1,8 por ciento más que el ejercicio anterior, y emplearon a más de 38.000 trabajadores, un 4 por ciento más.

Pese a la subida, en el caso del PTA, el parque malagueño registró una caída considerable. El PTA mantuvo estable las cifras de empleo y facturación durante el periodo de crisis -entre 2008 y 2013-, cerrando en 2013 con más de 14.600 trabajadores, una facturación superior a los 1.576 millones de euros -un 4,5 por ciento menos que en 2012- y un total de 620 empresas e instituciones instaladas sobre su superficie. Asimismo, cabe destacar que un 51 por ciento del total de los trabajadores son hombres y un 49 por ciento mujeres.

Los datos, correspondientes al cierre del ejercicio 2013, los ha dado a conocer hoy el consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, José Sánchez Maldonado, durante la inauguración del I Encuentro Empresarial de Parques Tecnológicos de Andalucía, foro organizado por la Red de Espacios Tecnológicos de Andalucía (RETA).

Además, el número de empresas se incrementó un siete por ciento hasta llegar a las 1.450, un aspecto que ha destacado el consejero, que ha precisado que estas infraestructuras de innovación representan ya el 3,5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de Andalucía.

"Son motores de crecimiento y de dinamización empresarial, han demostrado ser un medio eficaz para las empresas y están protagonizando una auténtica reestructuración productiva en nuestro territorio", ha subrayado.

En su opinión, los parques tecnológicos impulsan sectores estratégicos y están "mejorando" la eficiencia de sectores productivos tradicionales, en los que Andalucía tiene una gran capacidad competitiva y exportadora.

Entre ellos, ha citado el agroalimentario en Córdoba, la agricultura intensiva en Almería y Huelva, el aceite en Jaén o la acuicultura en Cádiz, aunque también se ha referido a los sectores de vanguardia como el sector aeronáutico en Sevilla, la biomedicina en Granada o las tecnologías de la información en Málaga.

Sánchez Maldonado ha señalado también los "esfuerzos" que se hacen en estos entornos por conectar el mundo científico con el sistema productivo y para avanzar en un modelo económico basado en el conocimiento.

Esta dinámica ha permitido a los parques andaluces alcanzar un importante posicionamiento a nivel nacional en materia de innovación y, de hecho, han liderado en los últimos años la captación de fondos nacionales en ayudas competitivas para infraestructuras y proyectos de I+D.

"Las tecnópolis están demostrando que la innovación es garantía de futuro y de oportunidades de crecimiento. Los parques tecnológicos han conseguido democratizar la innovación", ha remarcado.

El titular de Economía se ha mostrado convencido de que este modelo es "la vía más efectiva" para superar el déficit en inversión privada en I+D tanto en España como en Andalucía.

En el caso de Andalucía, el sector privado protagoniza tan sólo el 35 por ciento del gasto en I+D, mientras que en Europa el gasto empresarial supone más del 63 por ciento del total.

A propósito de estos datos, Sánchez Maldonado ha estimado que, pese a los avances, aun hay un "amplio camino" que recorrer para acercar a Andalucía al resto de regiones referentes en materia de I+D.

Por ello, ha considerado la inversión en I+D+i como "único camino posible" para mejorar la competitividad de la economía andaluza.

"Hay que mejorar el capital tecnológico de las empresas y la cualificación del capital humano, facilitando el emprendimiento y apoyando la internacionalización de nuestras empresas", ha esgrimido.