­Málaga sigue a la vanguardia en investigación científica y sus centros sanitarios siguen siendo referentes de España y Europa. Prueba de ello es que el Hospital Clínico de Málaga ha participado en un proyecto de investigación para la implementación de un programa de medicina personalizada en pacientes con cáncer de próstata, orientado a mejorar la gestión sanitaria y las políticas de salud en el abordaje integral de esta enfermedad a través de un manejo más eficiente de los recursos económicos y sociosanitarios, para dar una mejor respuesta a las necesidades de la población respecto a este tipo de dolencias.

La puesta en marcha de este proyecto, que tiene como base el estudio del cáncer de próstata mediante herramientas moleculares y perfiles epidemiológicos y genéticos, contribuirá a mejorar los conocimientos sobre el tumor más prevalente en la población masculina, con el objetivo de seleccionar de forma más precisa a pacientes candidatos a tratamientos de inicio, disminuir los sobretratamientos y sus efectos secundarios asociados; y mejorar la precisión en la indicación de los tratamientos personalizados, tal y como establecen las directrices marcadas por el Plan Integral de Oncología de Andalucía.

El centro sanitario malagueño ha participado en este estudio en dos fases. Una primera en la que se reclutó a treinta pacientes con esta enfermedad y a los que se analizó las características tumorales de la pieza quirúrgica extraída para comprobar, mediante un test, si los resultados y las recomendaciones concordaban con la evolución de los pacientes, lo que les ayudó a determinar si se había hecho un buen pronóstico y en qué medida había sido acertado el tratamiento y con posterioridad comenzó el ensayo clínico europeo «Empathy», cuyo objetivo era analizar el tejido tumoral antes del tratamiento.

Uno de los urólogos responsables del ensayo, Bernardo Herrera, admite que con esta línea de investigación pretenden implementar la medicina personalizada en el cáncer de próstata. «Esto ayudaría a conseguir perfiles individuales para encontrar el mejor tratamiento para los pacientes en el momento adecuado».

Y es que esta enfermedad es el tumor más frecuente en la población masculina y el segundo en causa de muerte. Su tasa de incidencia y mortalidad puede variar más de 25 veces según diferentes países, lo que ofrece una idea de que numerosos factores deben estar relacionados con su génesis o evolución.

Por eso, quieren analizar las características biológicas del tumor y qué tipo de riesgo ofrecen para determinar qué tratamiento es más adecuado. Según el doctor de la Unidad de Gestión Clínica Intercentros del Hospital Clínico, se ha descubierto que la utilización masiva del marcador tumoral de la próstata, el PSA, ha ayudado a diagnosticar la enfermedad de manera temprana y a mejorar la supervivencia. Pero lamenta que, en contraprestación, ha supuesto el empeoramiento de la calidad de vida de pacientes, cuyos tumores no eran significativos y se les ha sobrediagnosticado. «Sobrediagnosticar lleva a sobretratar, existe un porcentaje en el que les afecta mucho y se hace un manejo ineficiente de los recursos sociosanitarios y económicos». Y es que, según el experto, la medicina personalizada está en auge, porque además de revolucionar los modelos de salud es más costo eficiente.

Investigación

El Clínico ha participado en los ya mencionados estudios con el objeto de mejorar la atención a estos pacientes. En el primero de ellos se contó con treinta malagueños a los que se comparó la firma genética y después participó en un ensayo clínico multicéntrico en el que el centro sanitario ha sido el mayor hospital reclutador de España para valorar la capacidad de estas herramientas en población europea a nivel global. El doctor reconoce que aunque no han sido publicados aún, parece que mejoran la calificación de la enfermedad, entre un 45-60% frente a lo actual.

Las herramientas que mejorarían esta estratificación del diagnóstico se basan en hacer análisis de las moléculas del tumor para conocer su tipología. «Una vez hecho el diagnóstico de la pieza de tumor cogemos un pequeño segmento y trabajamos sobre él», dice. Este tipo de pruebas no se hacen en la actualidad y con los buenos resultados del estudio pretenden evidenciar su necesidad.

«Nosotros ya tenemos claro que esas herramientas pueden mejorar. Hemos presentado varias propuestas a la Comisión Europea para ver si lo financian», señala el médico. Y es que el urólogo reconoce que identificar mejor el riesgo del tumor ayuda a predecir esos riesgos y a darles una mayor seguridad con un tratamiento más adecuado.

La medicina personalizada tiene especial indicación para el ámbito de la urología y, más concretamente, para el cáncer de próstata. «Suele tener una historia natural muy larga y de crecimiento muy lento», afirma el médico, que señala que un porcentaje importante se beneficiará de otro tipo de tratamiento, muchos de ellos menos agresivos. Aunque por contra también existen los tumores galopantes en esta especialidad, estas nuevas herramientas sobre todo beneficiarían a los lentos.

Cada uno de los test supone unos 2.400 euros. El doctor Herrera afirma que aunque a priori pueda resultar caro, su uso redundaría a la larga en un beneficio humano y económico, pues ahorraría sesiones de tratamiento como radioterapia u hormonoterapia.