La justicia ha salvado finalmente el palacete de Villa Fernanda, una joya de la arquitectura regionalista en el Paseo de Miramar, fallando en contra de la construcción de dos bloques de viviendas en la zona no ajardinada del mismo.

La sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha estimado totalmente la demanda presentada por la comunidad de vecinos de la calle La Era, colindante con Villa Fernanda, y ha emitido un fallo en el que deniega la pretensión de levantar nuevas construcciones en Villa Fernanda, ya que ello supondría un clarísimo impacto visual y atentaría contra el carácter histórico y protegido tanto de las tres edificaciones que componen Villa Fernanda como de sus jardines, según anunció Javier Such, de Gaona Abogados, que ha defendido la demanda de los vecinos.

La sentencia desestimando la construcción de nuevos edificios se apoya en el Reglamento de Planeamiento Urbanístico, que desarrolla la Ley del Suelo y que ampara los conjuntos paisajísticos e históricos como el de Villa Fernanda. Por ello, la sentencia de TSJA considera básico respetar la armonía paisajística de la edificación y de los jardines históricos. El artículo 79 del reglamento establece la especial protección de «edificios aislados que se distinguen por su emplazamiento o belleza arquitectónica y jardines destacados por su hermosura, disposición artística, trascendencia histórica o importancia de las especies botánicas que en ellos existen».

El TSJA ha tenido en cuenta las características del jardín de Villa Fernando, que está protegido y catalogado, es de estilo francés, con ornamentos como estatuas y fuentes y que tiene 136 ejemplares con 26 especies distintas.

Para el fallo del tribunal ha sido también de gran importancia una recreación visual en infografía que permitía aprecia el impacto visual que supondría la construcción d de los dos bloques.

También ha resultado básica la presentación de informes y el testimonio de técnicos relevantes como el del director del Observatorio del Medio Ambiente Urbano (Omau), Pedro Marín, sobre los efectos negativos que tendría para Villa Fernanda la construcción de nuevos edilicios en su conjunto interior.

El proyecto presentado por los dueños de Villa Fernanda, que ahora ha tumbado el TSJA, preveía, además de la rehabilitación de los tres inmuebles históricos de Villa Fernanda, la construcción de dos bloques de viviendas de tres plantas; uno de ellos se levantaría en la zona que ahora ocupa la pista de tenis y el segundo sobre lo que ahora es el césped de la vieja piscina. El proyecto hubiera supuesto la eliminación de 36 eucaliptos, que deberían ser sustituidos por otras especies y la desaparición de dos yucas y tres phoenix canariensis que deberían trasplantarse.

Pese a que los tres edificios tienen protección arquitectónica de primer grado y que los jardines están protegidos, el proyecto había recibido el visto bueno de la Gerencia de Urbanismo, que había aprobado el estudio de detalle presentado por sus promotores y que ahora el TSJA ha tumbado.