­El decano del Colegio de Abogados de Málaga, Francisco Javier Lara, quiso contestar ayer al presidente de la Audiencia Provincial de Málaga, Antonio Alcalá, quien en una entrevista concedida a este periódico afirmaba tener abiertas ocho quejas contra jueces de la provincia pero no sabía el motivo. Lara, también en declaraciones a este medio, afirmó que Alcalá «no hace caso» a las protestas de los juristas.

Lara aseguró que el presidente de la Audiencia «falta a la verdad» cuando dice que «el decano no le ha trasladado el problema», y también tachó de «incierto» que se le haya requerido en varias ocasiones. «Me he reunido con él en el Colegio de Abogados, con los jueces decanos y con el fiscal jefe y planteamos las quejas después de haber visto primero qué hemos hecho mal nosotros y qué temas teníamos que cambiar, después de hacer autocrítica, pero no me hizo caso», dijo.

Alcalá indicó en la entrevista que «lo que no se puede considerar que es una pataleta infantil del presidente el que se encuentre molesto porque el decano haya denunciado a ocho jueces que realizan sus servicios en Málaga, y no le dé justificación de por qué». Lara, por su parte, aclaró que ha hablado muchas veces con él en privado y en foros públicos.

«Yo le he trasladado que una juez de Marbella hace barbaridades en su juzgado. Un día no va a juicio, con todas las citaciones, y desde las nueve a las dos de la mañana tiene citados a todos los abogados, y las partes. Se le llama a las nueve y media, y dice ‘es que se me ha averiado el coche, cojo un taxi y voy para allá’. A las dos se suspendieron todos los juicios. Tuvo a todo el mundo citado y no aparece. Se lo dije, y él me dijo que quería dar una oportunidad a la juez, yo le dije que no vendía zapatos ni ponía copas, administraba justicia en esas condiciones», relató.

Además, el decano de los abogados malagueños apuntó que se le ha dado traslado a Alcalá de los carteles de los juzgados con señalamientos de juicios «los mismos días y las mismas horas», o «cada cinco minutos». «Y también sabe Alcalá de jueces que dicen en medio del juicio ‘que conste que la letrada no conoce la Ley de Enjuiciamiento Criminal’ o ‘que conste que el letrado no sabe proponer pruebas’, o que hay una jueza de Torremolinos que le dijo a un detenido con ‘usted voy a hacer lo que me le dé la gana’», precisó.

Lara también se quejó de que muchas veces se cita a los abogados para los actos del Juzgado de Guardia, por ejemplo para los juicios de faltas, a las diez de la mañana y antes empiezan a tomarle declaración a los detenidos.

En cuanto a lo de la «pataleta infantil», Lara se quejó de que el presidente de la Audiencia no ha ido a varios actos destacados para el colegio, como el reconocimiento a una asociación de jueces a los abogados de oficio, o la concesión de las medallas de honor al expresidente de la Audiencia, Francisco Arroyo Fiestas, y al fiscal jefe de Marbella, Julio Martínez-Carazo. «No se invita a Alcalá, sino al presidente de la Audiencia, y las instituciones están por encima de las personas», apuntó.

«En tres ocasiones le he ofrecido sentarnos y aclarar las dificultades, me ha dicho que sí, y cuando la fecha está cerrada ha dicho que no puede ir», agregó Lara.

Lara quiso dejar claro que algunos jueces le han llamado para quejarse de que los han metido a todos en el mismo saco con las críticas, «lo cual es cierto», pero indicó que le han pedido hablar con él para darle solución a los problemas. No en vano, en una reunión en el colegio el próximo día 15 de diciembre van a tratar estos asuntos.

También se quejó de que hizo caso omiso de una reclamación contra una sección penal «que no consideró suficiente una operación de cáncer para suspender un juicio, echando la culpa a los secretarios judiciales».

Lara criticó que en algunos centros de detención sólo hay una comunicación al día y las detenciones «se prolongan 24 o 48 horas, la policía dice que son instrucciones de los jueces decanos, y eso es ilegal», e insistió en que él le ha contestado a todos los oficios al presidente. «Nosotros no tenemos empeño en matener la polémica, pero yo voy a seguir en la misma línea con total contundencia porque yo soy decano para defender la dignidad de la Abogacía y no para llevarme bien con Antonio Alcalá», concluyó.