La Semana Santa, esa fecha marcada a tinta en los calendarios de tantos malagueños, se deja sentir con fuerza en la ciudad y los cambios que provoca en la rutina diaria quedan patentes también en los medios de transporte públicos. Es es el caso del metro de Málaga, que se adentra en su primera Semana de Pasión con un amplio incremento del número de pasajeros que disfrutan de sus servicios.

Con el fin de que el trayecto de los viajeros del metro sea lo más satisfactorio posible en estas fechas, el metro de Málaga ha puesto en marcha un operativo especial. «Este plan de servicios especiales establece que entre el Domingo de Ramos y el Viernes Santo se aplicará una mejora de la frecuencia de paso de trenes, así como una ampliación del horario comercial», señala la empresa concesionaria de la Junta de Andalucía.

Dicho incremento de servicios estará centrado en la ampliación de la hora de cierre de sus líneas hasta las 2.30 horas el Domingo de Ramos, Lunes Santo, Martes Santo y Viernes Santo. Los viajes del ferrocarril metropolitano durante el Miércoles y el Jueves Santo se realizarán de manera ininterrumpida con servicio de 24 horas, al ser considerados los días de mayor afluencia de personas.

Con este cambio en el horario del metro de Málaga, la cantidad de viajeros que hacen uso de sus instalaciones se ha visto multiplicada en estas señaladas fechas. De este modo, ayer, Martes Santo, a pesar de ser aún un día laborable, la compañía de transporte malagueña ya había duplicado su cantidad de viajeros cotidianos antes de las ocho de la tarde, cuando la afluencia se incrementa de manera señalada por las procesiones que se desarrollan en el Centro de la capital malagueña, tal y como destacaba ayer uno de los trabajadores de la empresa.

Según expresan los propios ciudadanos que viajan habitualmente en el metro, el número de personas que hacen uso de este medio de transporte suele ser elevado, pero es en estas fechas cuando el número se está viendo ampliado en gran medida. Ante este incremento, la mayoría de los pasajeros tienen la misma respuesta: la causa es la rapidez. De ese modo, todos afirman que usan este transporte debido a la rapidez y la frecuencia tan seguida que existe entre los trenes, lo que hace que el viaje lo realicen de manera veloz y cómoda.

«Bajo todos los días al Centro para ver tocar a mi hijo en la banda y para eso el metro es una maravilla. Gracias a la frecuencia y a la rapidez llegamos en nada y encima no está tan repleto de gente», expresa Yolanda Martínez Fernández, ama de casa.

José Manuel Camos Sánchez, camarero y cofrade de 25 años, recalca de igual modo lo positivo del metro, señalando que tanto él como su compañero de cofradía están usando este transporte todos los días y les está haciendo más rápido el camino al Centro.

A pesar de las numerosas opiniones positivas de los viajeros, junto a los halagos también se encuentran algunas recomendaciones, como las realizadas por el compañero de José Manuel Camos, Rubén Caballero Fernández, que señala: «Debería haber horario ininterrumpido todos los días, no solo el Miércoles Santo y Jueves Santo».

Lo mismo le ocurre a Miguel González, un repartidor que usa con asiduidad el metro y con mayor frecuencia aún en estas fechas. González expresa: «Se debería ampliar el tiempo de cierre de los trenes porque cuando lo quieres coger más tarde no puedes».