Ahí estuvieron a eso de las seis de la tarde. Con leves sonrisas y apenas con cara de cansancio. Junto a los 35 integrantes que componen el consejo de alcaldes del Partido Popular. Llegados de toda la provincia a la capital para reunirse en cónclave con los tres miembros de la junta directiva del partido a nivel nacional.
La mañana la habían pasado el presidente del PP-A, Juanma Moreno, el presidente de los populares en Málaga, Elías Bendodo, y el alcalde de la capital, Francisco de la Torre, en Madrid. El AVE hace posible estas cosas. Permite, con relativa comodidad, asistir a la junta directiva del PP a nivel nacional para, por la tarde, trasladar la estrategia del partido a los que realmente se la van a jugar el próximo 24 de mayo: los alcaldes y alcaldesas del PP. Tras la adversidad de las elecciones autonómicas, los comicios municipales serán de urgente trascendencia para calibrar la capacidad de resistencia del PP. Ahora, que aún, mantiene teñido de azul gran parte de la provincia y, sobre todo, al conjunto de las capitales en Andalucía.
Dos años han pasado desde que Mariano Rajoy convocara a la junta directiva del partido. Sin embargo, a pesar de lo extraordinario, no hubo palabras sobre lo hablado en Génova. Al menos, durante las intervenciones a las que pudieron asistir los medios. Cabe la posibilidad que se hiciera alusión, una vez que se siguió a puerta cerrada.
Insistir en la recuperación. «En estas elecciones tenemos que ir con la cabeza bien alta», destacó el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el primero en intervenir, la actitud con la que deben moverse los futuribles alcaldes y alcaldesas del Partido Popular mientras que se adentran en la tarea de recaudar votantes entre los ciudadanos. Es tan importante para los populares en estos momentos la recuperación económica, como la necesidad de ganar las elecciones municipales.
Para ello, quedó claro ayer que la estrategia política estará basada en resaltar la gestión de los diferentes alcaldes y alcaldesas al frente de sus localidades. Entienden en el PP que radica aquí la piedra angular de la campaña, ya que muchos ediles habrían llevado a cabo un trabajo que habría servido para consolidar numerosos ayuntamientos que venían de estar en ruinas. En referencia a esta idea, De la Torre insistió en el relato de la recuperación económica como realidad empírica irrefutable. A pesar de que, precisamente, la percepción de los ciudadanos no haya estado siempre en sintonía. En este punto, sí admitió posibles «fallos de comunicación» a la hora de trasladar a la sociedad las políticas emprendidas por el PP en los últimos tres años. Políticas que habrían sacado a España, según De la Torre, de la sospecha de la «intervención económica», para ser el «país con mejores perspectivas de crecimiento de la Unión Europea». En este sentido, consideró que el «trabajo bien hecho» de todos los ediles debería convertirse en una ventanilla que canalice el mensaje de la recuperación que entona el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. «La imagen que se tiene de España hoy, no tiene nada que ver con la de hace tres años», describió el alcalde de Málaga una situación de un país que ya estaría dejando atrás, de forma definitiva, las piedras pesadas de la crisis económica.
Por su parte, Juanma Moreno pronunció un discurso de vocación crítica con el papel de la Junta de Andalucía y su relación con las instituciones municipales. De entre sus primeras reclamaciones, que adelantó ayer para la próxima legislatura autonómica, dejó claro que va a pedir de nuevo «una gran cumbre de alcaldes», para reunir a los ediles de las capitales andaluzas en una misma mesa. Hasta ahora, como denunció el propio Moreno, siempre con respuesta negativa por parte de Susana Díaz. «La Junta gobierna con un modelo autoritario. De arriba hacia abajo», sentenció Moreno sobre un modelo lejos de la plena autonomía municipal.
Prosiguiendo el decálogo de sus demandas, el líder popular insistió en que seguirá exigiendo la construcción del tercer hospital para Málaga y la apertura de los chares del Guadalhorce y de Ronda, a lo que habría que sumarle la ampliación del Hospital de la Costa del Sol. En la misma línea, reclamará la construcción de la ciudad aeroportuaria en Alhaurín de la Torre, un plan de revitalización económica para la Axarquía y el cumplimiento del «vertido cero» en las aguas residenciales de la Costa.
