Los representantes de todas las asociaciones consultadas son claros y contundentes: la peatonalización parcial o total de la calle Victoria «es un disparate» y «un caos» para los vecinos del entorno, por lo que la rechazan de plano.

Todas las asociaciones consultadas están en la misma línea tras conocer el estudio técnico estudio técnico realizado por una empresa de ingeniería por encargo del Ayuntamiento. La conclusión de dicho estudio es desaconsejar cualquier medida de rebajar el tráfico en la calle pues tendría afectaciones importantes para la movilidad peatonal, el tráfico rodado y el transporte público.

Las asociaciones del sector ya están en esa idea antes incluso de conocer el estudio. La más clara en sus argumentos es Ester Ramírez, presidenta de la asociación Centro Antiguo. «La mayoría de los vecinos no está por la peatonalización de la calle», afirma, «y el concejal Raúl López lo sabe pues lo ha escuchado ya en muchas reuniones». La peatonalización no es una demanda de los vecinos, sino que se ha creado artificialmente esa necesidad».

Ramírez asegura que «cualquier solución que pase por limitar el tráfico en esa calle, sería un caos», pues es una calle de «muchísimo tráfico que une dos sectores de la ciudad» y donde las alternativas de desvío de tráfico abocarían a atascos continuos». Ramírez insiste en «no aceptar la peatonalización», pues la experiencia de lo ocurrido en el resto del Centro nos lleva al temor de que la calle se convierta en un rehén de la hostelería».

Teresa Repiso, de la asociación plaza de la Merced, emplea argumentos parecidos para oponerse a la eliminación total o parcial del tráfico en la calle Victoria. «Sería un disparate, incluso si se elimina solo una dirección pues los vecinos de la parte alta de la Victoria se quedarían muy aislados». Señala además que las alternativas que propone el estudio para los desvíos de tráfico «obligarían a rodeos incomprensibles y colapsarían las calles como Lagunillas y otras. Que no nos agobien más con nuevas peatonalizaciones».

Juan Antonio García, de la asociación de vecinos y comerciantes de Lagunillas, considera que la peatonalización de la calle es un tema menor frente a «los graves problemas y carencias que tiene Lagunillas, producto de la dejadez municipal». «Peatonalizar no sirve, pero en todo caso habría que abordarlo dentro del problema global que supone el deterioro total del barrio».