La Audiencia de Málaga ha condenado a 11 hombres por organizar y llevar a cabo una operación para traficar con más de una tonelada de hachís, sustancia que fue interceptada cuando varios de los acusados la trasladaban a una furgoneta tras haber sido descargada de una embarcación en la localidad malagueña de Manilva.

Los hechos sucedieron en diciembre de 2011 en las inmediaciones de una urbanización. Según la sentencia, siete de los acusados fueron sorprendidos por agentes de la Guardia Civil cuando transportaban desde la embarcación, que se dio a la fuga al ver la presencia policial, un total de 42 fardos que contenían la mercancía.

Estos acusados, dice la resolución, habían sido reclutados por otros dos de los procesados. Uno de ellos, además, había organizado a otros para la ocultación en tierra de la sustancia estupefaciente y fue interceptado en las inmediaciones junto a otros dos hombres juzgados cuando hacían labores de control de la descarga.

El Tribunal de la Sección Segunda condena a todos los acusados por un delito de tráfico de drogas, imponiendo a nueve de ellos una pena de cinco años de prisión, según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press.

Además, a los dos reclutadores los condena a penas más altas, imponiendo a uno de ellos cinco años y nueve meses de cárcel y a otro, a seis años de prisión, en este caso por constarle una sentencia anterior por hechos similares, que era firme en el momento de los hechos.