­El año 2015 se ha iniciado con un leve descenso en el ritmo de desahucios de inmuebles en la provincia de Málaga en relación a 2014, un ejercicio de máximos que acumuló un total de casi 3.500 casos. Según los datos publicados ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), los juzgados de Málaga practicaron durante el primer trimestre un total de 885 desalojos de inmuebles, con un descenso del 7,4% sobre el mismo periodo del pasado año. En España, por contra, el número total de desahucios -cuyo término judicial es el de lanzamiento- sí subió en el primer trimestre un 2,1%, con 18.869 casos. La estadística de lanzamientos del CGPJ incluye todo tipo de inmuebles, no sólo viviendas, aunque esta tipología suele ser muy representativa.

Los datos del Consejo también permiten comprobar la evolución de los desalojos según obedezca a casuística de propiedad o de alquiler. En la provincia de Málaga el 50% de los casos registrados en este arranque de 2015 se originó tras una ejecución hipotecaria (embargo de la casa al propietario por parte del banco debido a impagos de la cuotas de la hipoteca) y otro 45,5% a procedimientos en aplicación de la Ley de Arrendamientos Urbanos (debido al impago del alquiler por parte del inquilino). El 4,4% restante obedeció a otras causas.

Comparado con las cifras del primer trimestre de 2014 se comprueba que los lanzamientos tras embargo hipotecario caen interanualmente en Málaga un 9,4%, mientras que los procedentes de impago de alquiler suben un 6,3%.

Menos ejecuciones de hipoteca

El informe del CGPJ también refleja en este primer trimestre de año, tanto a nivel nacional como provincial, una disminución en el volumen de nuevas ejecuciones hipotecarias, que suponen el inicio del proceso que más tarde suele acabar en los desahucios. En concreto, entre enero y marzo de 2015 se iniciaron en los juzgados españoles un total de 20.201 ejecuciones hipotecarias, lo que supone una disminución del 16,6% respecto a las 24.226 registradas en el mismo periodo del año pasado. En el caso de Málaga, la cifra fue de 938 casos, casi un 9% inferior a la de inicio de 2014.

Las ejecuciones hipotecarias son los procedimientos tramitados en los Juzgados de Primera Instancia que permiten exigir el pago de las deudas garantizadas por prenda o hipoteca al acreedor con escritura de hipoteca.

Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística (INE) también dio ayer sus propios datos relativos al primer trimestre: los embargos de viviendas habituales alcanzaron los 8.802 casos en España, con una reducción interanual del 6,9%, mientras que los relativos a todas las fincas (no sólo vivienda) alcanzaron las 30.952, un 5,2% menos. La disparidad de datos con el CGPJ obedece a que el INE usa la información del Colegio de Registradores de la Propiedad.

En cualquier caso, el director del Gabinete de Estudios de pisos.com, Manuel Gandarias, aseguró que el riesgo de las familias de ser desahuciadas se ha reducido considerablemente, aunque sigue siendo alto. «La estadística de ejecuciones hipotecarias, paso previo al lanzamiento, arroja porcentajes esperanzadores», apuntó Gandarias, que no obstante, precisó que sigue el foco sobre esta problemática, «más aún teniendo en cuenta el nuevo panorama político tras los resultados electorales».

Igualmente, dijo que las ejecuciones hipotecarias sobre vivienda habitual se refieren en ocho de cada diez casos a personas físicas, un aspecto que llama a la reflexión y al desarrollo de medidas que minimicen el impacto de los desahucios.

«Lo deseable sería que en 2015 las ejecuciones sigan decreciendo en volumen», afirmó.