Un numeroso grupo de trabajadores de Carrefour Málaga se ofreció ayer para trabajar como voluntarios en la rehabilitación de la Casa del Sagrado Corazón, antiguo Cottolengo. Durante toda la mañana de ayer y parte de la tarde, estos malagueños pintaron toda la planta baja del edificio y limpiaron este espacio, que estaba muy degradado. Además, donaron sillas y manteles para el comedor, que estaba muy necesitado de estos elementos.