­Agentes de la Policía Nacional han detenido al vigilante de seguridad de un establecimiento comercial de Torremolinos como presunto autor de un delito de hurto continuado durante su jornada de trabajo. Al parecer, aprovechaba su condición profesional y sus conocimientos para hacerse con los objetos que, posteriormente, vendía en tiendas de segunda mano, algo que venía haciendo desde hace un año.

La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por un responsable del departamento de seguridad del centro comercial después de que hubieran detectado la desaparición desde hacía meses de, entre otros efectos, objetos electrónicos, tales como iPads, móviles de última generación, consolas y videojuegos, del interior de la tienda, según informó en un comunicado la Policía Nacional. Las pesquisas condujeron a los investigadores hasta uno de los vigilantes de seguridad -perteneciente a una empresa subcontratada por el centro comercial- como el responsable de un delito de hurto continuado. Según las gestiones policiales, el ahora detenido aprovechaba su jornada de trabajo para hacerse con los efectos. Los ocultaba en una carpeta para posteriormente, y ya en la zona libre de cámaras, quitarles las alarmas y los vendía a tiendas de segunda mano.