La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha insistido en que los ayuntamientos de Málaga, Rincón de la Victoria y Fuengirola no han solicitado autorizaciónMálagaRincón de la VictoriaFuengirola en ningún momento para sus playas para perros. Es más, les ha advertido de que si las mantienen, se les levantará la correspondiente acta de denuncia.

A principios de este mes la Junta informó a los 14 municipios del litoral malagueño, así como a las mancomunidades de municipios Costa del Sol Occidental y Costa del Sol-Axarquía, de que, de acuerdo con la legislación vigente, no podrían contar con espacios en sus playas destinados para perros.

Las únicas excepciones son que se podrán autorizar estas playas cuando tengan el visto bueno previo de la autoridad sanitaria. En este sentido, no se considera suficiente la inclusión de dicha zona para perros en las correspondientes ordenanzas municipales. Tampoco se considera "razonable" que se permitan en periodos de gran afluencia de público como puede ser Semana Santa, aunque esté fuera del periodo que fija el decreto.

Donde sí podría habilitarse es cuando en la zona para la que se solicita esté "expresamente prohibido" el baño para las personas y debidamente señalizado; es decir, que no se pueda considerar una zona de baño, según el documento al que tuvo acceso Europa Press.

Sin embargo, después de que el Consistorio malagueño señalase que la playa habilitada entre Rincón y Málaga capital, en la desembocadura del arroyo Totalán, no estaba catalogada como zona de baño, entrando, por tanto, en esa excepción, la Junta ha asegurado que no podrán habilitar estos espacios "porque no disponen de ninguna autorización".

Así, fuentes de la Delegación Territorial de Medio Ambiente han precisado a Europa Press que los ayuntamientos de las tres localidades "no disponen de ninguna autorización de playas para perros, incluso en aquellas zonas que pudieran quedar excluidas del baño, toda vez que no lo han solicitado" al Gobierno autonómico.

Es más, han asegurado que en caso de que se mantengan dichas playas, se procederá a enviar a los agentes de Medio Ambiente para que levanten la correspondiente denuncia "y se le remitirá a la Demarcación de Costas", ya que, al no tener los ayuntamientos la autorización, "es un asunto de competencia estatal en materia sancionadora".

Por su parte, el Ayuntamiento de Málaga insiste en que la playa para perros que comparte con el vecino municipio de Rincón de la Victoria cumple lo establecido por la Junta, por lo que no se plantea cerrarla. No obstante, ha enviado un escrito a la Delegación Territorial de Medio Ambiente en el que, insistiendo en que este espacio no es una zona de baño para personas, se le pide que «tenga a bien catalogarlo como playa canina mediante el título de ocupación que proceda».

La concejala de Playas, Teresa Porras, señaló a Europa Press que en el Plan de Playas de 2015 ya se comunica la existencia de este espacio canino. «Con ese Plan de Playas entendemos que ya está más que comunicado», consideró la edil del PP, quien recordó a la Administración autonómica que este espacio lleva ya un año funcionando. «No voy a desmontar nada cuando cumple todos los parámetros que dice la ley», aseveró la edil.

En el Plan de Playas se dice que se trata de «un tramo de 450 metros de litoral en el que se permite el acceso de animales; esta playa no está incluida en el catálogo de zonas de baño, por lo que no es de aplicación la normativa sectorial al respecto». «Se cumple, por tanto, lo que la propia Junta de Andalucía establece como requisito», reiteró Porras, precisando que «todo el papeleo está hecho», motivo por el cual «la playa continuará como hasta ahora».

Casares, pionera en implantar una playa para perros

Casares fue el primer municipio malagueño en habilitar una playa canina en 2012; a la que siguió la conjunta entre Málaga capital y Rincón, y Fuengirola.