El pasado 26 de mayo los médicos contratados del servicio de urgencias del Hospital Carlos Haya comenzaron una huelga indefinida con el objeto de lograr más contrataciones y unas mejores condiciones laborales. Ayer, el comité de huelga canceló la huelga tras un mes y una semana de duración tras consensuar con los propios médicos un parón por el periodo estival. El motivo, según CSIF, fue que ayer mismo iban a comenzar los turnos de vacaciones y si se mantenía la convocatoria los trabajadores no podrían irse de descanso estival.

Por este motivo, y para no perjudicar a sus compañeros, los sanitarios decidieron desconvocar la huelga si la dirección accedía a negociar sus condiciones y a eliminar los turnos fijos de tarde impuestos a los médicos contratados a modo de «castigo». Según el presidente de sanidad en CSIF, el sindicato que convocó la huelga, la dirección se ha mostrado dispuesta a dialogar y a eliminar la «penosidad» de dichos turnos que impedían la conciliación de la vida laboral y familiar.

«Les hemos dado un voto de confianza porque siempre es mejor negociar sin la presión de la huelga», dijo Osorio, que recordó que si para septiembre la situación continúa, no dudarán en volver a convocarla una vez hayan concluido los cuadrantes de vacaciones. Además, según informó a este periódico el gerente del hospital, José Luis Doña, se ha comprometido a celebrar una mesa técnica de manera mensual, incluso en verano, para negociar la situación.

La plantilla denunciaba la falta de profesionales en urgencias -alertaban de que había catorce menos de lo estipulado- y que seis médicos estaban contratados al 33%. Aunque al principio exigían la cobertura total, terminaron pidiendo poner al 100% a todos los profesionales y la publicación anual del cuadrante para saber con tiempo los turnos y los descansos. Además, continúan reivindicando que se cubran las más de 10.000 horas que al año se quedan descubiertas entre el personal médico de la unidad de Urgencias, sin contar con posibles bajas ni permisos de los trabajadores. CSIF Málaga, junto a los trabajadores, continuará convocando protestas a las puertas del centro hospitalario cada mes en defensa de una mejora.