­El portavoz de IU-Málaga para la Gente en el Ayuntamiento de la capital, Eduardo Zorrilla, denunció ayer jueves la existencia de siete actuaciones, todas ellas «ilegales», en el jardín histórico El Retiro, situado en el barrio de Churriana por parte del propietario del recinto y «la enorme permisividad» de la Gerencia de Urbanismo, que «habría hecho la vista gorda».

Zorrilla dio cuenta de las obras que se han venido realizando en la finca, de las que informó este periódico (ver La Opinión lunes 29 de junio) y recordó que este espacio es una finca protegida y declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y Patrimonio Histórico de España, criticando a su vez «la enorme permisividad» de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), ya que las obras se están realizando desde octubre de 2014, «sin ningún tipo de licencia ni autorización».

Recordó que las actuaciones se iniciaron el 15 de octubre y han supuesto modificaciones importantes que han alterado la configuración de este espacio, lo que calificó como «un hecho muy grave».

El portavoz insistió en que las obras «están alterando de forma significativa la configuración de estos jardines históricos», y suponen «la desaparición del lago existente en la finca, de zonas verdes y sotobosques importantes, de especies arbóreas protegidas», como ejemplares muy raros y antiguos de distintas especies y árboles, cipreses y pinos centenarios de más de 30 metros de altura, además de otras especies vegetales y de flora ornamental.

«Es incluso si cabe aún más grave», que quien «debe velar por el cumplimiento de la normativa municipal», en referencia al alcalde, Francisco de la Torre, que, según Zorrilla, «visitó al menos en una ocasión la finca mientras estaban desarrollándose estas obras y comió en la casa invitado por el propietario y no supiera de esto, o quizá lo sabía, lo que sería mucho peor», criticó.

Por este motivo anunció que reclamará al alcalde para que «dé explicaciones sobre este asunto». Asimismo, anunció la presentación de una moción para reclamar «máxima transparencia» respecto a estos hechos, y que «se actúe de forma contundente contra los responsables», así como que se tomen medidas para «evitar estas agresiones al patrimonio histórico y botánico de la ciudad», del que forma parte esta finca y jardín histórico.

Igualmente, pidió a la GMU que investigue «estas ilegalidades», y que «de forma inmediata inicie el correspondiente expediente de disciplina urbanística», y en caso de que no lo hubiera hecho ya, «un expediente sancionador y de restablecimiento de la legalidad».