La distribución del gasto municipal se ha desequilibrado durante la crisis y los ajustes acometidos sólo han podido equilibrar una parte de las cuentas. En concreto las inversiones, ya que las estructuras municipales siguen siendo prácticamente las mismas que antes de la caída de los ingresos. Así, casi un tercio de los municipios malagueños destina más del 40% de sus gastos a pagar los gastos de personal.
Los datos de la liquidación del presupuesto municipal de 2014, facilitados por el Ministerio de Hacienda, muestra el enorme peso que representa el personal municipal. De media, un 37% de los gastos de los municipios de la provincia se destinan a cubrir los sueldos de los funcionarios, una cifra que contrasta con apenas el 10% que se reserva para inversión. En 2008, justo el año en el que estalló la crisis, las inversiones municipales representaban alrededor del 21% del presupuesto anual, algo más del doble.
La evolución de las inversiones ha sido muy evidente a la baja, cargando el grueso de los ajustes de los ayuntamientos. No se puede decir lo mismo de los costes laborales que tuvieron un descenso un poco más acusado en 2012 por los recortes a los funcionarios aprobados por el Gobierno, recuperándose en 2013 y 2014.
De hecho, sigue siendo la principal partida de un presupuesto municipal. En algunos casos de forma evidente. De los 29 municipios malagueños que destinan más del 40% de sus ingresos a financiar esta partida, hay tres municipios que gastan más de la mitad. En concreto son Casares, con el 58,9%; Marbella, con el 54,9%; y Tolox, con el 53%.
Estas tres localidades ven comprometida la mayor parte de su presupuesto por el pago de las nóminas de la plantilla municipal, aunque también destacan otros municipios que están coqueteando con esas cifras, como es el caso de Ojén (49,6%), Árchez (47,9%), Cortes de la Frontera (47,5%) y Manilva (47,3%).
Málaga capital es una de las localidades que ha logrado un notable equilibro en sus cuentas, destinando sólo el 33,1% de sus ingresos a pagar la plantilla municipal, una cifra similar de la utilizada en los presupuestos de Rincón de la Victoria, Fuengirola, Alhaurín de la Torre, Estepona y Nerja, entre otros.
Los datos del Ministerio de Hacienda sobre la liquidación del presupuesto municipal de 2014 muestra también la existencia de otras localidades con una política de personal muy prudente. Salares, con el 12,1% de los gastos totales, es el municipios que destina el menor porcentaje de su presupuesto a pagar la plantilla. Le siguen Atajate (15,9%), El Burgo (16,4%), Júzcar (16,6%), Cuevas del Becerro (18,2%); Iznate (18,3%) y Vélez Málaga (19,9%).
Sobre los ciudadanos
La importancia de la partida de gastos de personal en el presupuesto municipal tiene una forma de medirse en comparación con el esfuerzo que cada vecino tiene que hacer para sostener esta estructura. Así, en Árchez se destinaron en 2014 unos 484.000 euros para pagar nóminas. Esto supone el equivalente a 1.086 euros por habitante de este municipio, la proporción más alta de la provincia.
En esta clasificación, salvo Marbella (922,60 euros por habitante) y Manilva (836 euros) el resto de municipios que destacan por la alta carga impuesta a sus vecinos son pequeñas localidades. Benalauría, Moclinejo, Genalguacil y Atajate destinan entre 997 y 845 euros por habitantes para pagar a los funcionarios de estos municipios. Esto se explica por la debilidad de sus cuentas y por una estructura funcionaral que, en cuanto sobrepasa un poco lo normal, hace que el presupuesto se resienta.
Crecimiento del gasto
Parece que la mayoría de los ayuntamientos de la provincia dejaron los ajustes de lado el año pasado, curiosamente un ejercicio preelectoral. Así, 61 de los municipios malagueños incrementaron su gasto en personal. En algunos casos incluso duplicando las cifras del año 2013. Es el caso de Cútar (144,82% de incremento en un ejercicio), Cuevas Bajas (109,74%) y Moclinejo (103,77%).
En cambio, hay otros 35 municipios en los que siguen bajando la partida de gastos de personal, destacando los ajustes acometidos en Salares (-59,6%), Fuente de Piedra (-43,8%) y Riogordo (23,06%). Además, quedarían por sumar otros ocho que no han dado sus datos todavía.
En cuanto a la capital, el crecimiento de la partida de gasto de personal es muy moderado, apenas ha ganando un 3,04% en un año, fruto más de la subida del IPC aplicada al importe final de las nóminas.
