­El equipo de gobierno de Málaga ha aceptado investigar las «presuntas irregularidades» en la contratación de trabajadores eventuales y fijos en Limasa y «adoptar las medidas necesarias para ponerles fin». La propuesta formaba parte de la moción presentada por el grupo de IU y que fue aprobada por unanimidad en la comisión de Medio Ambiente de ayer.

La moción aprobada exige también que se cumpla el compromiso de una «mayor contratación de eventuales para reforzar el trabajo del personal fijo para una mejor limpieza de la ciudad».

Aunque el concejal de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, avaló la investigación de posibles irregularidades en las contrataciones, aseguró que «no me consta que haya ninguna; cada vez que alguien se ha quejado he pedido datos y todo resulta irreprochable». Jiménez añadió que la investigación permitirá «constatar por parte de todos que todo se hace con limpieza» .

También quiso dejar claro que ya se está cumpliendo el compromiso de una mayor contratación de eventuales. «Todos trabajan más que el año pasado; este año habrá 5.000 jornadas más que en 2014». concluyó.

El comité lleva al Sercla el acuerdo de 2013

El comité de empresa de Limasa ha decidido denunciar ante el Sercla (Servicio extrajudicial de resolución de conflictos laborales) el «principio de acuerdo» alcanzado en diciembre de 2013 que acabó con la huelga. La dirección de Limasa consideró que aquel principio de acuerdo tenía rango de convenio colectivo y así trató de aplicarlo.

Sin embargo, la Junta de Andalucía, en dos ocasiones, ha rechazado está opción de la empresa y ha estimado que el acuerdo de 2013 no puede considerarse un convenio. La empresa ha optado entonces por denunciar esta decisión de la Junta de Andalucía ante los tribunales, que deberán decidir.

Pero mientras, el comité de empresa ha movido ficha y ha presentado demanda ante el Sercla para que éste se pronuncie sobre si el acuerdo de diciembre tiene rango de convenio o no. La demanda se verá hoy miércoles. Si el Sercla, como espera el comité, rechaza que el acuerdo tenga rango de convenio, los trabajadores esperarán hasta diciembre cuando caduca el acuerdo (era por dos años) y entonces reclamarán que, a falta de otro, se vuelva al convenio de 2010, que estaría vigente.

Ello supondría volver a recuperar la paga de productividad, el descansar sábados y domingos y volver a las vacaciones en verano, entre otros derechos.