Málaga cuenta con 17.141 trabajadores autónomos, dato hasta junio de 2015. Sin embargo, la mayoría de provincias de Andalucía experimentan un descenso en el registro de esta modalidad de trabajador. Las cifras totales señalan que en la comunidad están censados 72.320 autónomos y en España, 388.836.

Por sectores, actualmente el del comercio es el que cuenta con mayor número de autónomos en Málaga con un total de 30.957 personas. Con diferencia, le siguen las actividades de hostelería. En cuestión de un mes, y coincidiendo con el inicio de la temporada estival, el número de autónomos en este sector se incrementó en un 0,9%, llegando a los casi 14.000 afiliados, exactamente 13.899. Después de estas actividad, la tercera posición del ranking va para la construcción, que cuenta ya con un grueso de 10.942 autónomos, cifra que también supera a la del mes anterior.

Rafael Amor, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos de Andalucía (ATA), afirma que la situación de los autónomos ha mejorado en los últimos años gracias a formaciones como ATA y la insistencia de los trabajadores. «Antiguamente, si un trabajador de la construcción se caía la lesión le contaba como un resfriado. Ahora tienen apartados de riesgos laborales».

En este sentido también se han reconocido los derechos de la «trabajadora autónoma». Ahora, las mujeres han conseguido tener unas prestaciones en la baja maternal de las que antes no disponían.

Sin embargo, según Amor, «el colectivo tiene mucho que mejorar». Los autónomos tienen que trabajar, hay mucho que luchar y ahora mismo, además, también destacan que la vida política parece estar sujeta a cambios con ayuntamientos en los que han irrumpido nuevas fuerzas o hay varios partidos en coalición. La principal premisa de los autónomos es no parar quietos para conseguir que se genere empleo. «Si se genera empleo habría más gasto social para dar atención a todos los trabajadores, ahora es momento de quitar las trabas administrativas que sufren los autónomos», señala Rafael Amor.

Objetivos a cumplir

Aunque ATA entiende que los autónomos no pueden soportar el peso del gran desempleo, en los últimos años, coincidiendo justamente con los peores momentos de la crisis, han experimentado un crecimiento positivo en altas.

Debido a este aumento, es importante que estos dispongan de facilidades y acuerdos con las instituciones públicas. «Tenemos que lograr un acuerdo para autónomos que lleven más de cinco años trabajando» pero trabajadores y asociaciones coinciden en el problema de la financiación. Y es que ATA afirma que «el 67% no acuden a entidades financieras a pedir crédito porque durante la crisis han tenido sobre tributación».

Otro de los principales objetivos que quieren alcanzar es que las altas y bajas se puedan realizar en el día natural. Sigue siendo inadmisible que, si te das de alta el día 20, se cobre el mes entero. «También han existido casos realmente lamentables como que un trabajador falleciese el día 2 o 3 y a final de mes le llegase a la viuda la cuota de autónomo a pagar», expone Rafael Amor.

Para ATA, la incertidumbre es la gran desventaja a la que se enfrentan a día de hoy los autónomos, «sobre todo no solo con respecto a la calidad de las actividades que realizan o las ventas, sino al futuro, al no saber lo que les puede pasar».

La asociación de autónomos hace hincapié en que a la mayoría de emprendedores se les niega el crédito y tiene que hacer «encaje de bolillos» para sacar su negocio adelante. Y que, además, están sometidos a que las leyes que los rigen cambien de la noche a la mañana.